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Jueves 4 de octubre de 2001 | |
 MAS INFORMACION: Dos manotazos fueron suficientes para la cosecha "académica" |
Boca no lució, pero ganó y sube |
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Con lo justo batió a Central y se mete en el pelotón de los escoltas. |
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| BUENOS AIRES (DyN) - Sin lucirse demasiado, sufriendo quizá más de lo necesario, Boca abrochó otra victoria, esta vez ante Rosario Central por 3 a 1, y todavía no renuncia a pelear por seguir en la pelea por el título. Central fue mejor en el primer cuarto de hora del partido. Presionó bien arriba aprovechó que los jugadores de Boca tardaron demasiado en meterse en el partido. Pero la visita no aprovechó su momento (un remate de Pizzi dio en un palo) y cuando y Gaitán se despertaron, el partido cambió de dueño. A partir de ese instante, comenzó el momento de Boca que sin embargo le faltó algo: crear peligro sobre el arco de Tombolini. Pero el equipo de Bianchi viene en racha, y cuando tuvo su primera chance la concretó. Corrían 17 minutos, Riquelme se la puso a Gaitán, éste tuvo todo el tiempo para acomodarse y sacar un zurdazo que se transformó en 1 a 0. En el complemento, Boca tuvo un par de aciertos: controló a Arias y de ese modo le sacó a Central su principal arma de ataque, y se paró en contraataque, creando las mejores situaciones de gol. Delgado tuvo el segundo, pero su cabezazo medido se fue desviado y al rato, Central logró el empate. La defensa de Boca pensó una cosa, pero Rivarola hizo otra: metió la pelota por abajo al centro del área y allí, insólitamente libre de marcas, Arias sacó un zurdazo que fue a morir dentro del arco. Parecía que el partido se volvía chivo, pero en la jugada siguiente al gol de Central, llegó el segundo de Boca. Gaitán mandó un centro desde la derecha, Cetto tomó a Burdisso y Madorrán vio penal. Riquelme: 2 a 1. A Central se le vino el mundo abajo, se lanzó al ataque pero se expuso a las replicas de Boca. Delgado lo tuvo, pero su remate pegó en el palo izquierdo; Riquelme se lo perdió por querer hacerlo de lujo y después erró un penal (infracción de Díaz a Carreño) haciendo estrellar la pelota contra el travesaño. El 3 a 1 llegó a los 42, cuando Riquelme metió un pase perfecto a Martínez, quien sólo tuvo que definir ante la desesperada salida de Tombolini. Boca hizo lo justo y ganó bien. Aún no perdió la esperanza por un nuevo campeonato. |
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