Sábado 1 setiembre de 2001 | ||
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La actividad económica caerá el 1,4% |
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Por primera vez en siete décadas, el PBI registrará tres caídas anuales consecutivas |
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La economía argentina caerá un 1,4 % este año de acuerdo con la carta de intención que la Argentina firmó con el FMI. La nueva estimación, que revisa la expectativa de crecimiento de entre el 2 y el 2,5 % para este año, fue anunciada por el secretario de Política Económica, Federico Sturzenegger, durante un conference call con inversores internacionales a quienes brindó detalles del acuerdo con el Fondo. El funcionario señaló que la economía probablemente mostrará una retracción del 1 % en el tercer trimestre del año. "Vemos un deterioro de la perfomance fiscal, que nos ha forzado a revisar a la baja nuestras estimaciones de crecimiento de la economía", dijo Sturzenegger. Por otra parte, la expectativa de crecimiento para el 2002 es del 3,5 %, inferior incluso al 5 % que el ministro de Economía, Domingo Cavallo, pronosticó recientemente para el último trimestre de este año cuando asumió en su cargo en marzo pasado. Sturzenegger añadió que, según la medición del FMI, el déficit fiscal del 2002 será de 2300 millones, aunque según Hacienda será cero, cumpliendo con la promesa del gobierno de aniquilar el desequilibrio. Por su parte, el secretario de Finanzas, Daniel Marx, señaló que la intención del equipo económico es "crear las condiciones que le eviten al país tener que recurrir al Fondo, pero demás está decir que cuando nos sentamos a discutir con el FMI discutimos la ampliación de los vencimientos" de los créditos con la entidad que el año próximo rondarán los 3.000 millones. Marx agregó que el Gobierno enviará al Congreso para fin de año un proyecto para modificar la coparticipación federal de impuestos a las provincias. En tanto, el funcionario adelantó que el Gobierno empleará 4.000 de los 5.000 millones de dólares adicionales que el Fondo Monetario enviará a la Argentina en setiembre para fortalecer las reservas del Banco Central y los 1.000 millones restantes irán a la Tesorería para ayudar mejorar el perfil fiscal. Además, el gobierno buscar utilizar los 3.000 millones de dólares que el Fondo enviará a más tardar en marzo próximo para concretar una transacción "amigable" de canje de la deuda, probablemente el próximo año, agregó Marx, negociador oficial de la deuda. Esa operación podría incluir un canje de deuda nueva de largo plazo garantizada por organismos multilaterales para bajar el monto y el costo de la deuda. Marx agregó que en el caso eventual de que la Argentina tenga acceso al mercado de capitales, los fondos podrían destinarse para recomprar deuda directamente. Además, el gobierno podría optar por reducir su stock de Letras del Tesoro de 5.000 a 1.000 millones de dólares. (Télam-Reuters) Saldo positivo en la balanza comercial de julio La balanza comercial registró en julio un superávit de 586 millones de dólares con respecto a igual mes del año pasado, debido a un derrumbe de 20 % en las importaciones y a un descenso de casi uno por ciento de las exportaciones, informó ayer el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC). En los primeros siete meses del año, el intercambio comercial argentino obtuvo un saldo positivo de 2.586 millones de dólares, frente a un resultado superavitario de 1.031 millones registrados en igual lapso del 2000. En julio, las exportaciones argentinas disminuyeron menos de 1 % respecto a un año atrás, al totalizar 2.355 millones de dólares frente a los 2.367 millones del mismo mes del 2000. El volumen de exportaciones sumó en los primeros siete meses del año 15.810 millones de dólares, lo que representa una suba de 3 % con relación al mismo período del año anterior. En cambio, la profundización de la recesión económica se reflejó nuevamente en el nivel de importaciones, que en julio se desplomaron 20 % frente a igual mes del año pasado, al llegar a 1.769 millones. Las compras internas en los siete primeros meses verificaron una disminución de 8 % en la comparación internacional, al totalizar 13.225 millones de dólares. El superávit obtenido en julio es superior al saldo positivo de 165 millones verificado en el mismo mes del año pasado. La fuerte caída en las importaciones mantuvo la tendencia que se había registrado en junio, cuando la caída fue de 19 %. Entre los motivos de este comportamiento se destaca la plena vigencia del factor de empalme, que encarece las compras en el exterior, y la persistencia de la recesión que impacta el consumo. A esto hay que sumarle la aguda crisis financiera que encareció las tasas de interés y por ende provocó la paralización de una buena cantidad de inversiones productivas. (DyN, Infosic) El empleo se mantuvo La actividad comercial tuvo una baja performance en agosto, aunque arrojó una sensible mejora en las ventas, las perspectivas que a corto plazo haya una mejora también resultaron escasas, y la única buena noticia en el sector fue que el empleo se mantuvo medianamente estable, según la encuesta mensual de la Cámara Argentina de Comercio (CAC). El relevamiento, llevado a cabo durante los primeros 15 días de agosto que es cuando se define la tendencia de la actividad, también evidenció que se redujo el uso de la tarjeta de crédito. En ese sentido, el 11 % de los encuestados sostuvo que en lo que va del año las ventas con tarjetas de crédito se incrementaron, un 35 manifestó que no sufrieron variación, en tanto que un 41 consideró que disminuyeron, y el resto no opinó. El trabajo evidenció una leve mejora de las expectativas positivas, tanto a nivel sectorial como provincial para los próximos tres meses. (DyN) |
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