Lunes 17 de setiembre de 2001

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Ríver no pudo con el síndrome de la paternidad

  

D"Alessandro la tuvo "atada"
 

Fue lo mejor de los "millonarios".
  Angel Comizzo (4): En el primer tiempo prácticamente no participó en el juego porque Boca estuvo lejos de exigirlo. En el segundo mostró muchas dudas en las pelotas que cruzaron el área chica.
Ariel Garcé (4): Con tendencia a cerrar su línea. En el segundo período tuvo problemas cuando lo encararon, en particular Marcelo Delgado.
Celso Ayala (5): Fue de mayor a menor. Comenzó con mucha autoridad en el juego aéreo, pero en el segundo período participó de las dudas que mostró el fondo de Ríver en esa faceta del juego. Fue el principal responsable en el gol, ya que la pelota superó su salto y no tuvo reacción cuando Comizzo dio elr ebote y dejó que Gaitán pateara con suma comodidad.
Mario Yepes (6): También jugó un muy buen primer tiempo y estuvo apenas discreto en el segundo. De cualquier manera fue lo más solvente en el fondo de Ríver.
Matías Lequi (5): En el mano a mano no se mostró del todo confiable. Fue importante mostrándose como salida por su sector en el primer tiempo.
Eduardo Coudet (6): La dinámica de siempre. En el primer tiempo tuvo mayor presencia ofensiva que en el segundo período. Pero inexplicabelmente fue sustituído por Ramón Díaz.
Guillermo Pereyra (6): Fue un hombre clave en el primer tiempo porque le ganó casi siempre a Juan Román Riquelme. Después comenzó a excederse con las infracciones.
Andrés D"Alessandro (7): Fue el hombre que mejor trató la pelota a lo largo de todo el partido. Su presencia por la izquierda fue un problema insoluble para Boca. En el segundo capítulo no lo buscaron lo suficiente y esa fue una de las razones por las que Ríver perdió peso en la ofensiva.
Esteban Cambiasso (5): En la primera parte intervino en el muy buen trabajo del bloque medio de Ríver, pero estuvo menos seguro que otras veces con la pelota y su segundo tiempo resultó intrascendente. Se lo vio cansado y no fue compañía de los delanteros millonarios.
Ariel Ortega (6): La figura fundamental de Ríver en el primer tiempo. Su habilidad y su precisión fueron los argumentos principales de su equipo en ofensiva. Decayó verticalmente después. Tuvo muy poca participación en el segundo tiempo.
Martín Cardetti (3): No se asoció nunca al trabajo ofensivo de Ríver en el primer tiempo. Se enredó con la pelota y no tuvo ningún peso como atacante en ninguno de los dos períodos.

Córdoba sostuvo a su equipo cuando estaba nocaut

Oscar Córdoba (8): Sostuvo a Boca cuando estaba para perder por nocaut. Tres intervenciones heroicas en el primer tiempo impidieron que Ríver se escapara en el marcador. Fue la figura del superclásico.
Jorge Martínez (4): Andrés D"Alessandro lo superó con frecuencia y además por su sector Ríver tuvo los mejores momentos cuando se decidió a atcar. En el segundo tiempo jugó más adelantado, pero no tuvo claridad con la pelota.
Rolando Schiavi (5): Sin mucha prolijidad, pero fue bastante eficiente, en particular, en el juego aéreo. Con problemas cuando se vio enfrentado mano a mano.
Nicolás Burdisso (6): De lo mejor de los últimos tiempos. Se fue afirmando con el correr del partido. En el segundo tiempo fue importante en el área rival.
Clemente Rodríguez (3): Sin firmeza en la marca, lento de reacción y muy complicado con la pelota.
Cristian Traverso (4): No hizo pie en el primer tiempo. Algo mejor en la parte final. Sin trascendencia cuando quiso ser salida ofensiva.
Mauricio Serna (5): Descontrolado en el primer tiempo. Le costó encontrar la posición. Se superó en la parte final, en la que fue fundamental para el dominio territorial de Boca.
Wálter Gaitán (6): Prácticamente desaparecido en el primer tiempo, fue clave en el segundo, en especial cuando se juntó con Marcelo Delgado. Pisó el área rival con decisión, le sacaron una pelota en la línea y convirtió el empate.
Juan Román Riquelme (4): La voluntad para pedirlas todas y mostrarse siempre, pero nunca logró imponer su manejo. Pareció falto de reacción física.
Guillermo Barros Schelotto (5): Tras un primer tiempo en el que nunca ganó en la personal, en el segundo fue importante, en particular en el aspecto táctico, abriendo la cancha, bajando a recibir y colocando centros peligrosos.
Marcelo Delgado (7): En el primer tiempo se vio obligado a volantear y, aunque no lució, valió su esfuerzo pese a que no pudo con los marcadores rivales.
En el segundo fue clave. Tanto en diagonal como por afuera, su presencia en la izquierda del ataque de Boca fue la principal complicación para Ríver.
   
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