Peligra el fondo de desempleo, que cada vez llega a más gente

En Río Negro hay casi 2.000 beneficiarios de ese seguro. La cifra es algo menor en Neuquén: 1.300 desocupados.

ROCA (AR).- La crisis económica sigue golpeando duro en los hogares de la región y son cada vez más los rionegrinos y neuquinos que piden el seguro de desempleo al Estado nacional. Desde junio del 2000 hasta julio de este año hubo que asistir a 670 personas más en la zona, creciendo el número de subsidios de 1.478 a 1.981 en Río Negro y de 1.150 a 1.317 en Neuquén.
Con un aumento constante de la desocupación como marco en todo el país, donde a mediados del año anterior se otorgaba el subsidio a 122.059 personas y hoy a 145.316, los vitales fondos para cada familia están en peligro. De acuerdo a publicaciones aparecidas ayer a partir de fuentes de la Anses, el Fondo Nacional de Empleo se quedaría sin recursos disponibles para afrontar el beneficio en septiembre próximo.
Esto se debe a que el Presupuesto 2001 previó una partida de 210 millones de pesos, pero el crecimiento en los índices de desocupación hizo que el monto total necesario trepara a 308 millones. A esto se suma que la recesión y la disminución de puestos de trabajo consumieron antes de lo previsto los aportes privados que financian el subsidio. Más allá de esto, las consultas realizadas en las delegaciones zonales de Anses determinaron que a la región aún no llegaron noticias sobre las dificultades por las que atraviesa la prestación.
Lo grave de la situación puede advertirse al comparar los desembolsos que el Estado nacional debía realizar en junio del año pasado para cancelar los seguros de cada desocupado en el país y lo que necesita ahora. En aquel mes el gasto fue de 30.816.733 pesos, mientras que trece meses más tarde tuvo que erogar un total de 36.309.101 pesos.
Hilando más fino, la comparación de iguales períodos determinó que en Río Negro el gasto pasó de 390.528 pesos a 521.715, mientras que en Neuquén se elevó 304.429 pesos a 330.110.
La Prestación por Desempleo se otorga a los trabajadores en relación de dependencia, bajo Ley de Contrato de Trabajo, que hayan sido despedidos por motivos ajenos a su voluntad, como por ejemplo despido sin justa causa o por quiebra del empleador y que tengan un mínimo de aportes al Fondo Nacional de Empleo.

Lo que se tiene en cuenta

El tiempo de duración del beneficio depende de la antigüedad laboral, sumándose a cada cuota la asignación familiar correspondiente. Si antes de ser despedida la persona trabajó entre 12 y 23 meses recibirá cuatro cuotas, mientras que si la ocupación fue de 24 a 35 meses los pagos mensuales serán ocho. Por su parte, si la relación de dependencia superó los 36 meses el seguro tendrá una duración de 12 meses. Si durante la percepción de este beneficio el desocupado consigue trabajo deja de percibir el cheque.
El subsidio que perciben los desocupados tiene un piso de 150 pesos y un techo de 300 pesos mensuales. La cifra varía según el sueldo que percibía en su último empleo la persona que solicita esta ayuda en la Anses. Para calcularlo, la Anses estableció que en los primeros 4 meses se debe tomar la mejor remuneración neta mensual, normal y habitual de los últimos seis (6) meses trabajados y dividir dicho importe por dos. Si el resultado es menor a 150 pesos, se cobran 150. Si es superior a 300, se cobran 300.
Del quinto mes al octavo se percibe el 85% del monto cobrado en el primer período (pero nunca menos de 150) y del noveno al último el 70% del monto cobrado en el primer período (pero nunca menos de150).
De acuerdo a los datos obtenidos por este diario desde el organismo encargado de liquidar el seguro de desempleo, durante el año pasado se efectuaron 1.494.436 pagos en el país, que incluyen los 18.426 de Río Negro y 14.492 de Neuquén.
Las principales ciudades en las que se reciben solicitudes para recibir el subsidio son Neuquén y Roca. En la primera los empleados advirtieron que se realiza un promedio de 30 trámites diarios por el seguro (ver aparte), mientras que en la sucursal rionegrina se consignó que casi un cuarto de todas las prestaciones de la provincia pasan por las ventanillas de las oficinas de la calle La Pampa.

Foto: Mucha de la gente que acude a las oficinas de Anses va por el seguro de desempleo, cuyos números se dispararon con la desocupación.