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El PJ reúne hoy a sus gobernadores con sus legisladores para consensuar estrategia.

Después de una fuerte presión del Poder Ejecutivo, que alternó amenazas con mensajes de dramatismo, el bloque de senadores justicialista debió aceptar adelantar para hoy la reunión con los gobernadores de su partido prevista para el lunes, y manifestó su disposición para votar el domingo la ley de ajuste fiscal.
El gobierno desplegó una estrategia en forma de abanico que incluyó al presidente Fernando de la Rúa, el jefe de Gabinete, Chrystian Colombo, y los ministros de Economía, Domingo Cavallo, y de Interior, Ramón Mestre, quienes en modo convergente se encargaron de llamar prácticamente a todos los gobernadores justicialistas y a los principales referentes de la bancada opositora de senadores.
No era para menos, los rumores de default desde los EE.UU, que incluían pronósticos nefastos, entre ellos los que ponían en duda la continuidad de la Convertibilidad, impactaban en la Bolsa y el Riesgo país volvía a superar la barrera de los 1600 puntos básicos.
Pero esto no fue todo, los Bancos que habían comprometido efectuar un aporte “patriótico” discutían con el gobierno, pues este había puesto en duda la entrega de fondos por parte de las entidades si el Senado no sesionaba rápidamente.
En medio de las negociaciones para adelantar la sesión al fin de semana, un juez laboral frenaba el ajuste y declaraba la inconstitucionalidad del último párrafo del decreto de ajuste.
A lo largo de toda la jornada el Presidente y los funcionarios, a quienes se sumó el titular de la Asociación de Bancos de la Argentina (ABA), Eduardo Escassany, y otros representantes del sector financiero, machacaron con una misma idea: si la ley no es aprobada este fin de semana el riesgo de una crisis económica terminal es inminente.
El esquema que siguió el gobierno, con la compañía de los empresarios, apuntó a comprometer a los gobernadores justicialistas para que ejerzan influencia sobre los senadores, a cambio de que la Nación haga tangible los fondos que las provincias le reclaman insistentemente.
Por eso, como parte del mensaje, Escassany les dijo a los gobernadores con los que habló que el lunes ya están disponibles 200 millones de pesos del fondo fiduciario para las provincias.
La dinámica del gobierno en pos de lograr la sanción de la ley llegó al extremo de que Colombo viajó a la tarde a La Pampa para reunirse con el gobernador Rubén Marín, y al mismo tiempo con el titular de la comisión de Presupuesto y Hacienda del Senado, Carlos Verna.

Febriles negociaciones

Si bien los senadores del PJ habían dicho que el tratamiento de la ley de ajuste estaba previsto para el martes, la movida del Ejecutivo empezó a revertir esa tendencia a partir del mediodía, especialmente después de que De la Rúa dijo que la ley podría votarse “el domingo o el lunes”.
A esa hora hubo dos pequeñas señales convergentes de que los tiempos se estaban acelerando: el jefe del bloque justicialista, José Luis Gioja, decidía adelantar para hoy su regreso a Buenos Aires mientras los empleados de su bancada empezaban a acondicionar con cuarenta sillas la sede de la bancada opositora . Al mismo tiempo, se empezó a hacer una red de llamados para asegurarse que entre hoy y el domingo todos los senadores opositores estén en Buenos Aires.
Al promediar la tarde ya estaba confirmado el encuentro con los gobernadores para hoy a las 19 (estaba prevista para el lunes a las 17) y las máximas posibilidades para sesionar el domingo. Queda aún por dilucidar cuál será la actitud que adoptará la mayoritaria bancada justicialista, ya que hasta ayer todos sus miembros, así como la mayoría de los radicales, aseguraban que la norma sería votada con modificaciones, una alternativa inadmisible para el gobierno.
De todos ya recobraron fuerza las alternativas de votar una ley complementaria junto con el ajuste fiscal, o de que el PJ favorezca el quórum estricto de 37 senadores en el recinto para que haya sesión y para que el radicalismo pueda imponer mayoría en la votación .
La amplitud del abanico de posibilidades fue admitida por Carlos Corach, uno de los que había estado más duro durante la semana pero que ante el agravamiento de la situación se reunió con Mestre para analizar el cuadro en el Senado. “La resolución se adoptará hoy con los gobernadores. Todas las alternativas están abiertas. No está descartado prestar el quórum y votar en contra, introducir modificaciones o no votar la ley”, sostuvo el ex ministro.
Pero no todo el PJ está de acuerdo con reveer su postura. Augusto Alasino, otro de los más férreos impulsores de no aceptar una reducción en los salarios, aseguró a esta agencia que mantendrá su postura. Si el PJ decide brindar quórum para votar en contra, la disyuntiva se centrará nuevamente en saber si el radicalismo reúne el mínimo de 19 senadores para tener la mitad más uno de los votos si hay 37 legisladores en el recinto. (DyN)

Polémica entre los bancos y el gobierno por el préstamo “patriótico”

El equipo económico se vio envuelto en un cruce de declaraciones con los banqueros, en torno al empréstito denominado “fondo patriótico”, por el que las entidades se comprometieron a adelantar al Gobierno parte de futuros pagos del impuesto a las Ganancias a una tasa del 9 % anual.
El subsecretario de Finanzas, Julio Dreizzen, afirmó que “algunas de las entidades más representativas ya condicionaron su concurrencia al proyectado canje de Letes a la aprobación en el Senado del déficit cero”.
Sin embargo, la propia Asociación de Bancos de la Argentina (ABA) salió a desmentir “categóricamente” a Dreizzen. “Por el contrario, las entidades financieras están cumpliendo con el aporte de la primera cuota del 40 % comprometida del citado fondo, estando prevista su integración total en los próximos días, tan pronto sea dictado el decreto respectivo. El compromiso asumido con las autoridades prevé un segundo desembolso del 30 % a los 30 y el resto a los 60 días”, precisaron los banqueros en un comunicado. En ese sentido, el vocero del Gobierno, Juan Pablo Baylac, intentó ponerle paños fríos a los dichos de Economía, y señaló que “los bancos no exigen que el Senado apruebe la ley.
Según trascendidos, los banqueros ejercieron presiones cuando fueron notificados que en el Senado se intentaría desaprobar el interés del 9 % que impusieron al gobierno para entregarles su “patriótico” aporte.

El voto de legisladores regionales

Los únicos dos senadores de la región que participarían de una eventual sesión de urgencia para tratar la ley de “déficit cero”, son el rionegrino Horacio Massaccesi y Felipe “Pipe” Sapag del Movimiento Popular Neuquino.
En cuanto al resto, por diversas razones se descontaba sus inasistencias. El otro representante de la UCR por Río Negro, Gagliardi, se encuentra en un “misterioso” viaje por Europa.
El justicialista Remo Costanzo, desde Viedma, negó toda posibilidad de concurrir a la Capital Federal.
En relación a los otros dos representantes neuquinos, Silvia Sapag tampoco vendrá a Buenos Aires porque “en Neuquén hay necesidades mucho mayores”, explicaron desde su despacho.
Por último, el justicialista Daniel Baum se recluyó en su provincia y optó por no contestar la consulta de esta agencia.
Ayer por la tarde, el emepenista “Pipe” Sapag, permanecía en esta ciudad a la espera de una posible convocatoria para tratar la iniciativa Su postura es no impedir el quórum para que se pueda tratar el proyecto, aunque adelantó que votará en disidencia con la propuesta oficial.
“El ajuste hay que empezarlo por la planta política: legisladores y judiciales. Lo jueces no hacen aportes impositivos, pero todos tenemos que hacer un esfuerzo y los privilegios se tienen que acabar”, expresó “Pipe” Sapag en diálogo con “Río Negro”.
Por su parte, Masaccessi recibió la orden del titular de la bancada, Jorge Agundez, de esperar hasta último momento para ver si se puede tratar la norma.
El rionegrino adelantó que permanecerá en la ciudad “el tiempo que sea necesario” para avanzar de acuerdo a lo que exige el Poder Ejecutivo. Massaccesi flexibilizó su postura inicial y se encolumnaría con el ministro, Domingo Cavallo. (ABA)

Foto: Antes de partir para asistir a la asunción de Toledo en Perú, el presidente rogó para que se sesione sin que se modifique lo ya aprobado.