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Buenos muchachos, Por Julio Rajneri

Juzgaron al ministro Sartor por una estafa: será absuelto

La Cámara Tercera había pedido el juicio político, pero el titular de Salud y Desarrollo Social se presentó espontáneamente. Es por la causa en la que se investiga la presunta defraudación al ex BPRN cuando era empleado. La fiscal Norma Terbay no solicitó condena.

ROCA (AR).- El ministro de Salud y Desarrollo Social, Daniel Sartor, se sentó ayer en banquillo de los acusados por la causa en la que se investiga la presunta defraudación cometida al ex Banco Provincia de Río Negro cuando él era empleado de la entidad. A pesar de que la sentencia se leerá el 3 de mayo próximo, ya se sabe que quedará absuelto, porque la fiscalía a cargo de Norma Terbay no solicitó condena alguna.
Después de que la Cámara Tercera del Cri-men pidiera en primera instancia el desafuero del ministro, la Legislatura lo negara e insistieran más tarde en el pedido de juicio político, Sartor se presentó espontáneamente ante la Justicia. Esto permitió que ayer se llevara adelante la audiencia de debate por el juicio en el que se determinará la responsabilidad del actual funcionario, en ese entonces empleado, en un supuesto movimiento de fondos entre dos cuentas del banco en marzo de 1991 y que habría ocasionado un perjuicio para la entidad.
Por el hecho, el banco inició dos causas contra Sartor. En la primera fue sobreseído.
Luego de que el ministro negara ayer todas las imputaciones en su contra ante el tribunal integrado por Fernando Sánchez Freytes, Jorge Bosch y Aldo Rolando, llegó el turno para cinco testigos, que explicaron la desordenada situación administrativa del banco en esa época y el marco en el que se denunció la presunta irregularidad.
Concretamente, a Sartor se le imputa la responsabilidad por la transferencia de 183 pesos actuales (la suma en la causa está expresada en australes) desde la cuenta del Colegio de Farmacéuticos a una que estaba a nombre de su hermano Raúl y él. Sin embargo, la existencia de una contra transferencia que se realizó diez segundos después para devolver el dinero a la cuenta inicial favoreció la hipótesis de la defensa, que entendió que se trató de un error administrativo y no una maniobra de estafa.
Además, tampoco se pudo comprobar que Sartor fue quien se encontraba al frente de la computadora al momento de la supuesta transacción fraudulenta. Esto fue avalado por los empleados, que dieron constancia en la audiencia del descontrol administrativo reinante en la sucursal roquense en 1991. Los testigos confirmaron que cada empleado tenía una clave y un código personal para ingresar al sistema, pero habitualmente trabajaban con una sola para no tener que esperar entre cinco y seis minutos para cambiar de clave cada vez que la computadora alternaba su operador.
Sartor recordó que ese día ingresó su código personal, pero de ninguna manera realizó una maniobra irregular. Para el funcionario, todo pudo tratarse de un error sin intención de alguno de sus compañeros del banco.
En su alegato, la fiscal Terbay entendió que no existen pruebas que permitan establecer la autoría de Sartor en los hechos imputados. Además, consideró que ante la contra transferencia realizada diez segundos después de la primera operación se impidió que el banco pagara intereses doblemente (al Colegio de Farmacéuticos y a la cuenta de los Sartor), por lo que no se produjo perjuicio alguno contra la entidad. Teniendo en cuenta la imposibilidad de acreditarle el hecho, la fiscal solicitó que se absuelva a Sartor lisa y llanamente. A su turno, Pandolfi realizó el mismo pedido que el Ministerio Público, por lo que el tribunal dictará sentencia en favor del imputado.

"Que me imiten"

"Siempre estuve muy tranquilo porque sé que no tuve ninguna responsabilidad en esto. Lo que pido es que otros funcionarios investigados me imiten y se presenten espontáneamente ante la Justicia sin ampararse en sus fueros. Lo digo concretamente por el senador Horacio Massaccesi".
Estas fueron las primeras palabras del ministro Sartor al retirarse ayer de los tribunales roquenses junto a su defensor, Oscar Pandolfi. Minutos antes, el abogado patrocinante de Sartor calificó al juicio como ridículo, ya que "la causa no habría llegado a esta instancia si hubiera sido otra persona y si la prensa no le hubiera dado la tremenda trascendencia que dio".
En su alegato, Pandolfi también aludió a los errores en el proceso de instrucción sumariante, ya que "se vulneró el derecho de defensa de Sartor, que nunca pudo declarar en la investigación inicial". Además expresó que arriesgarse por 183 pesos sería imposible, cuando trabajaba hacía 16 años, tenía la firma registrada y una carrera por delante". (AR)

Foto: Daniel Sartor se retiró al mediodía de los tribunales roquenses luego de comparecer ante la Cámara Tercera.