Boca bailó a Ríver y le puso emoción al torneo

No dejó dudas el buen trabajo del equipo "xeneize", que se acerca en las posiciones.

BUENOS AIRES (Télam).- Una soberbia actuación del "bastonero" Juan Román Riquelme le permitió a Boca golear en la "Bombonera", al líder del Clausura, Ríver Plate, por 3 a 0, y le puso un poco de emoción al torneo tras completarse la décima fecha.
Hugo Ibarra, el propio Riquelme (tras el rebote de un penal que le atajó Franco Costanzo) y Guillermo Barros Schelotto (desde los doce pasos) le pusieron cifras a la holgada victoria del equipo que dirige Carlos Bianchi, que ahora acortó la diferencia con los "primos" (22) a siete puntos y le dio esperanzas al resto de los que pugnan por llegar a la cima de las posiciones.
Los primeros 45 minutos demostraron las ambiciones de unos y otros, porque mientras Boca salió decidido a buscar la victoria, Ríver hizo todo lo contrario: se retrasó y esperó para conseguir algún contraataque que le posibilitara irse al vestuario con un gol de diferencia a su favor.
Y así salió el partido. El conjunto local -que jugó el mejor primer tiempo en lo que va del torneo- se lo llevó a Ríver por delante y dispuso de las mejores situaciones de gol.
En esto tuvieron mucho que ver los buenos primeros 30 minutos que jugaron Omar Pérez y Riquelme. De los pies de estos jugadores salió lo mejor de este Boca renovado, que dejó atrás la pálida imagen de fechas anteriores.
Pero lo bueno que salía de los pies del "Pelado" Pérez y de Román no encontraba eco en los dos delanteros: Marcelo Delgado y Antonio Barijho.
Sin embargo y pese a no tener peso en el área millonaria, Boca se las ingenió para inquietar a Costanzo. Los de Bianchi manejaban la pelota y el partido merced al buen trabajo de Mauricio Serna y Cristian Traverso en el mediocampo, pero en su afán de conseguir el primer gol dejaron huecos en el fondo y Ríver estuvo a punto de aprovechar esto en una réplica.
Lo que sí sintió Ríver fue la ausencia del suspendido Eduardo Coudet y careció de manejo de balón, porque tanto Ariel Ortega como Javier Saviola no gravitaron.
El final de la primera etapa coincidió con el inicio de la segunda: Boca como amplio dominador y Ríver desbordado por su rival.
Boca vio que podía ganar el partido y comenzó a "castigar" a su rival con un ataque tras otro: a los 6 y 14 minutos, Riquelme, tras dos grandes jugadas, sacó sendos remates que se fueron cerca del palo izquierdo de Costanzo. Y a los 20, Ibarra sacó un exquisito disparo que se clavó en el ángulo superior derecho de Costanzo.
Era el 1-0 que no sólo ponía justicia, sino que también premiaba la búsqueda de uno, Boca, y castigaba el planteo amarrete de otro, Ríver.
Pero el conjunto de Gallego sintió el impacto y abandonó su cautela. Y al descuidarse atrás Boca le dio otro golpe cuando le cometió penal a Clemente Rodríguez.
Entonces, Riquelme -la gran figura de la cancha- enfrentó a Costanzo, pero el arquero le contuvo el disparo, aunque luego el propio Román tomó el rebote y de cabeza puso el 2-0. A esa altura el partido estaba liquidado.
Y si con el gol de Riquelme (le dedicó la celebración "de orejitas paradas" a Macri) los de Núñez no daban muestras de reacción, con el penal de Barros Schelotto, que significó el 3-0, esto se convirtió en un hecho irrefutable.
El final llegó con la búsqueda de Ríver -hasta el 2 a 0- y con Boca replegado para salir de contra.
El local hizo todo para ganar y golear. Por eso fue justo que se quedara con el superclásico.

Precios elevados y poca recaudación

BUENOS AIRES (Infosic).- Los elevados precios de las entradas dispuestos por la dirigencia de Boca Júniors dejaron como saldo una mala recaudación en el superclásico, de 464.132 pesos, una cifra muy inferior respecto a partidos anteriores disputados en la "Bombonera".
La goleada de Boca sobre Ríver fue presenciada por menos público que el esperado como consecuencia de entradas muy caras.
Un claro ejemplo de las elevadas tarifas son las plateas, las cuales treparon hasta los 140 pesos.
Los precios de los boletos, incluso, motivaron que los dirigentes de Ríver devolvieran unas 1.500 plateas (de entre 80 y 140 pesos) en señal de protesta.
Las últimas recaudaciones en la "Bombonera" rondaron los 700.000 pesos, y la cifra inferior al medio millón de ayer se reflejó en los sitios vacíos que se vieron en las plateas del estadio "xeneize".

foto: Juan Román Riquelme y Jorge Bermúdez festejan con todas las ganas el gol del armador de Boca, tras el rebote de Costanzo en el primer penal