Sábado 24 de marzo de 2001

 

Al compás de los anuncios, la Bolsa subió 6%

 

El respaldo político que dio el gobernador Carlos Ruckauf al Plan de Competitividad llevó al Merval a los 430 puntos. El riesgo país no cede y la tasa interbancaria llegó al 100% anual.

  BUENOS AIRES.- El apoyo que el justicialismo comprometió para aprobar este mismo fin de semana la delegación de facultades legislativas al Poder Ejecutivo, previsto en el paquete económico del ministro Domingo Cavallo, impulsó una suba del 6,21% a las acciones líderes de la Bolsa de Comercio, interrumpiendo un retroceso permanente desde el 7 de marzo.
Sin embargo, el riesgo país no cedió y se ubicó en 1198 puntos según el índice MBA. Asimismo, la tasa interbancaria a 3 días llegó a pactarse en las primeras horas al 100%.
De todos modos, la evolución de los últimos minutos de la rueda permite avizorar a los operadores una disminución del riesgo para el lunes, si se tiene en cuenta que al promediar la rueda estaba a niveles aún mayores que los del cierre.
Del mismo modo se espera que el call money llegue a niveles razonables con el correr de los días.
El mercado siguió los movimientos políticos del día con una atención mayor a la habitual, en especial los pasos del ministro de Economía.
Las gestiones ante las autoridades brasileñas, la reunión con el presidente Fernando De la Rúa en Olivos, con el gobernador bonaerense Carlos Ruckauf en Hacienda y -ya fuera del horario de operaciones- con el presidente de la Cámara de Diputados, Rafael Pascual, agregaban paulatinamente nuevos argumentos para la suba accionaria.
Fue así que poco después de las 13 el Merval se ubicaba en terreno negativo y a partir de las 14:30 comenzó una rápida suba que en una hora llegó al 3,5%, para luego estacionarse en una oscilación entre el 2 y el 3%.
La conferencia de prensa en la que Cavallo y Ruckauf informaron que el Parlamento sesionará el fin de semana hasta aprobar el otorgamiento de facultades especiales al Ejecutivo (sin alcanzar a despidos masivos ni a recortes jubilatorios) disparó la bolsa hasta su cierre en 429,25 en el Merval. La suba fue en definitiva del 6,2%.
De esa forma, el índice muestra una suba del 2,99% en lo que va del 2001, pero aún se mantiene en un terreno negativo del 1,51% en marzo. El Merval Argentino (M.AR) subió en la jornada un 6,71%.
Sobre 52 acciones operadas, se registraron 34 alzas, 3 sin cambio y 15 bajas.
El índice de bonos MBA cerró en 265,23 puntos, con una caída del 0,55%. Acusa una baja del 6,57% en marzo y del 4,54% en lo que va del 2001.
Por su parte, los ADR, con la excepción de la caída del 1,02% en IRSA, cerraron con subas. Las principales fueron Quilmes (5,56%), TGS (5,26%), Banco Francés (4,35%) y Telecom (4,29%).

Continúa creciendo el déficit fiscal

El déficit del Sector Público no financiero alcanzó a 557 millones durante febrero, por lo que acumula en los dos primeros meses del año 1.506 millones, informó ayer la Secretaría de Hacienda.
Con este déficit acumulado, y el resultado del ejercicio cuasifiscal del Banco Central, al Gobierno Nacional le queda un margen de 593,7 millones de pesos en marzo para cumplir con lo acordado con el Fondo Monetario Internacional.
Al asumir la cartera económica Ricardo López Murphy, funcionarios del Ministerio aseguraron que el acumulado en los dos primeros meses alcanzaba a los 1.800 millones, por lo que para marzo, mes en el que generalmente el déficit ronda los 700 millones, quedaban solo 300 para cumplir con el Fondo, y no casi 600 millones como revelan ahora los números. La recaudación de febrero se vio favorecida por el ingreso de 182 millones de pesos proveniente de la concesión de Loma La Lata, y otros 60 por contribución del Banco de la Nación Argentina.(Télam)

Podrían recaudarse 16.000 millones anuales con el impuesto al cheque

El nuevo impuesto a las transferencias de las cuentas corrientes podría recaudar una cantidad de dinero similar a la que en la actualidad produce el IVA, es decir, unos 16 mil millones de dólares por año, según cálculos de analistas.
Según datos del Banco Central de la República Argentina (BCRA), cada mes entran y salen de las cuentas corrientes entre 110 mil y 120 mil millones de pesos, correspondientes a depósitos, libramientos de cheques y otros tipos de transferencias.
Como el nuevo impuesto se aplicará sobre el depósito y sobre la extracción, con una alícuota de hasta el 0,6 por mil en cada operación, para el total de la masa de dinero en movimiento se debe tomar una tasa real del 1,2%.
El gravamen no es nuevo en la Argentina, ya que existió en la década del 70, en tanto que en Brasil, ha sido uno de los pilares sobre los que afirmó su política fiscal.
Sobre esos datos estimativos, el economista Orlando Ferreres, señaló que el impuesto podría generar una recaudación de "1.440 millones de pesos mensuales o 15.280 millones por año, si se toma como promedio de giro unos 120 mil millones".
"El impuesto es distorsivo, porque entre otras cosas encarece la transferencia de acciones y títulos. A las comisiones de los agentes de bolsa, que están entre 0,2 y 0,4%, habría que sumarle el 1,2% de este impuesto, ya que estas operaciones se liquidan con cheque", agregó.
Fuentes del BCRA indicaron que en la Argentina el nivel de giro en las cuentas corrientes está en el orden de los 110 mil millones de pesos.
Esto es que con esa cifra, el impuesto dejaría unos 1.320 millones de pesos aproximadamente.
No obstante, tal cual está redactada la ley, parte del tributo podrá ser descargado en el Impuesto al Valor Agregado (IVA) o en Ganancias.
Ese porcentaje quedará a definición del flamante ministro de Economía, Domingo Cavallo, por lo que en realidad no se puede establecer con anterioridad cual será el neto resultante, que de acuerdo a la ley, pasará a conformar un fondo especial que al parecer manejará el Palacio de Hacienda.

Descuento automático desde el banco

Con la nueva ley, toda vez que se mueva dinero en una cuenta corriente (depósitos o retiros) el titular de esa cuenta pagará un impuesto de hasta el seis por mil que le será descontado automáticamente por el banco, según la ley de competitividad.
La norma entrará en vigencia al día siguiente de publicada en el Boletín Oficial, por lo que se presume que la próxima semana ya estará en vigor.
Por la misma ley se determinó que, en adelante, no podrá hacerse ningún pago total o parcial por una suma de dinero mayor a 1.000 pesos si no se efectúa a través de un cheque, tarjeta, depósito bancario, giro, transferencia u otra forma que pudiera crearse para registrar oficialmente las transacciones.
Todo pago mayor a 1.000 pesos que se haga por afuera del circuito bancario será considerado "en negro" y, según dice la ley, "no surtirá efecto entre las partes", es decir que legalmente podría llegar a considerarse como que no existió tal pago si el que abona no tiene un comprobante bancario.
Con el impuesto del 6 por mil a los débitos y créditos de cuentas corrientes, el Gobierno espera recaudar en forma rápida y directa varios miles de millones de dólares (no se hicieron estimaciones oficiales) que permitirían revertir antes de fin de año el fatídico "déficit fiscal".
Con el tope de 1.000 pesos para transacciones en efectivo, lo que busca el Estado es blanquear operaciones comerciales para después aplicar los impuestos correspondientes (en especial, IVA y Ganancias) a los actores de esas transferencias.

   
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