El lago Nahuel Huapi desagua hacia el Océano Atlántico a través del río Limay, que nace en el extremo sureste de mismo y determina el límite entre las provincias de Río Negro y Neuquén. En él se pueden desarrollar varias actividades como pesca, camping, caminatas y particularmente el rafting, disciplina que consiste en descender por los caudalosos ríos usando botes inflables o gomones. Se puede acceder desde la costa por la ruta Nº 40 (ex Nº 237), donde encontramos primero la desembocadura del Río Ñirihuau, zona asidua de pescadores por su cercanía y por ello bastante explotada, lo cual no la hace muy productiva. Hacia la margen izquierda nos encontramos con una gran bahía de costa de piedra bocha y guijarros de pendiente pronunciada, que tiene como punto de referencia una maderera. Se trata de un muy buen pesquero para los aficionados al spinning, siendo los mejores momentos cuando se halla azotada por fuertes vientos del sector Oeste, que en esta zona pegan bien de frente. Siguiendo la ruta, y ya dentro del ejido de la ciudad hay sectores más que interesantes teniendo en cuenta la accesibilidad y la cercanía. Ejemplos clásicos son, el pedrero que se ubica detrás de la estación de ferrocarril, la bahía de la margen derecha de la desembocadura del Río Ñireco y los pedregales del Km. 4. Este último por la conformación de su costa resulta muy apto en días calmos, para la modalidad del fly casting. Siguiendo por Av. Bustillo, llegamos a Playa Bonita en el kilómetro 7,5, descubrimos un pedrero muy apto para pesca con mosca. Caminando por la costa, tras 2 km. de marcha, llegaremos a Puerto Moreno, sector conocido por estar al reparo de los vientos predominantes de la zona, provenientes del cuadrante Oeste. El pesquero de la península de San Pedro es muy apto para muchos aficionados al spinning, aunque no tiene un rendimiento parejo, a veces podemos encontrar buenos ejemplares de trucha Marrón. El pesquero de Piedra de Galeani, a la altura del km. 23, convoca una mayor cantidad de aficionados. Siguiendo por Circuito Chico, a partir de Puerto Pañuelo. Luego llegamos a Bahía Tacul, donde las posibilidades de capturar Arco Iris de buen porte son muy significativas. El único problema, es que por tratarse de un lugar tan bello, con los primeros calores, la acción de los acampantes disminuye las posibilidades de pesca. El Arroyo Angostura, que tras breves 150 mts., une el Lago Perito Moreno con el Nahuel Huapi es un buen pesquero con posibilidades de grandes portes, aunque sólo rinde a principios y final de temporada, por tratarse de un lugar muy concurrido en verano y porque el arroyo sirve de conexión natural a las embarcaciones entre ambos lagos. Si disponemos de una embarcación podemos visitar uno de los pesqueros clásicos: las costas de la península de San Pedro, aunque la cercanía lo torna bastante concurrida. Se caracteriza por sus abundantes pedregales y la considerable hondura a muy escasos metros de la costa. Una posibilidad para aquellos que no posean una embarcación, es partir en catamarán desde Puerto Pañuelo hasta Puerto Blest, con estadía en la hostería del mismo nombre. Esto nos permite, aparte de conocer las bellezas naturales del sector, realizar una excelente pesca en el extremo Oeste del brazo Blest, donde la existencia de nutridos juncales resulta de atracción para la fauna ícticola. Las capturas más frecuentes son de Arco Iris y Fontinalis. Otros pesqueros, son la Isla de los Víveres, la Escuelita, el área de influencia del Arroyo Castilla y la parte exterior del brazo Huemul. Se trata de pesqueros ideales para la práctica de spinning o trolling, lanzando intermitentemente a la costa desde la embarcación. Existen, sin embargo, pocas áreas para el fly cast, las cuales son puntos aislados entre grandes farallones de roca de gran hondura y que presentan buenas chances de capturas interesantes. |