Zapala
Fauna en el Parque Nacional Laguna Blanca
 
  El Parque Nacional Laguna Blanca distante a 30 km. de la ciudad y al cual se accede desde Zapala por la ruta nacional 22, la nacional 40 y luego por la provincial 46, que atraviesa el parque.
 
 

Fue creado en 1940 para preservar una de las mayores poblaciones de Cisnes de Cuello Negro del país. Es el área de nidificación más importante de la Patagonia, con más de 100 especies de aves. Posee un mirador señalizado y un pequeño centro de interpretación en la Casa del Guardaparque. En el Parque también permite el avistaje de patos, flamenco, galleretas y cauquenes. Aquí se encuentra con un zona para acampar y disfrutar del área natural. La época ideal para visitar el lugar es de noviembre a marzo, ya que en este momento es donde se pueden hay mayor cantidad de aves.

Es un espejo de agua salobre que se desprendió del Océano Pacífico al surgir la cordillera de los Andes, en lo que hoy es Neuquén, y se convirtió en el sitio de nidificación de aves migratorias más importante de la Patagonia, con numerosas especies terrestres y huellas arqueológicas en su derredor. 

El Parque Nacional Laguna Blanca, el más norteño de la Patagonia, debe su nombre al plumaje de los cisnes de cuello negro que cubrían sus aguas cuando fue creado.

La reserva está conformada por la laguna que le da el nombre, de unas 1.700 hectáreas y una profundidad máxima de 10 metros, y otras ocho más pequeñas, además de cerros y valles, con vegetación típica de la estepa, arroyos, mallines y coladas de lava.  Si bien las más de cien especies que nidifican o estacionan son el atractivo fuerte, fuera de las aguas habitan pumas, zorros, choiques, lagartijas y gatos silvestres, mientras cóndores, águilas y halcones dominan las alturas. 

A todo esto se suma la belleza del paisaje del lugar, donde se abastecían los habitantes originarios, que vivían en gran medida de la caza del guanaco, y dejaron petroglifos, sepulturas y utensilios de piedra, entre otros testimonios de su presencia. 

El paseo comienza junto a la ruta provincial 46, donde hay un mirador con largavistas para los turistas, un centro de interpretación y un camping libre. 

Por la Bajada de los Choiques se llegó al Cajón del Llano Blanco, por el que corre el arroyo del mismo nombre que desemboca en la laguna, y donde el pasto es más tierno y verde.

Las lagunas Verde y del Molle están pobladas de flamencos, patos y algunos cisnes. Las otras lagunas que conforman el parque y la reserva son las Jabón, Antiñir, del Hueso, Antonio, del Hoyo y parte de la del Overo, mientras fuera del límite norte está la Blanca Chica.  Este parque es uno de los pocos donde está autorizada la pesca sin devolución y con red, porque la intención es achicar la población de especies ictícolas introducidas. 

El parque se halla en el Cordón del Chachil, que con sus 2.830 metros es el más alto de la zona, aunque está fuera de la reserva. Dentro de ésta están los cerros Morado, de 1.501 metros; el Laguna, de 1.459, y el Mellizo Sur, de 1.723.  Luego de atravesar el arroyo Pichi Ñireco, principal afluente de la laguna central, es necesario vadear el espejo de agua, para luego retomar la huella pedregosa y arribar al punto de partida.