·Excursiones Lacustres Sin duda, “vedettes” de cada año son los paseos lacustres, que han incorporado no sólo infraestructura mejorada y nuevas embarcaciones, sino también recorridos totalmente inéditos como Isla Victoria desde Villa la Angostura y los brazos Norte del lago Nahuel Huapi, una ruta que por primera vez se abre al turismo “grande”. - Excursiones al Bosque de Arrayanes en Quetrihué El catamarán “Futaleufú” realiza la excursión al Bosque de Arrayanes todos los días, menos miércoles, a las 10.30 y a las 14.30. El ingreso al Parque nacional tiene un pequeño costo tanto para argentinos como extranjeros. El catamarán “Patagonia Argentina”, fue botado el 15 de mayo de 2004. Todos los días, menos miércoles, embarca en el puerto de la Brava con destino al Bosque de Arrayanes bordeando la costa oeste de la península de Quetrihué. - Isla Victoria La excursión a la Isla Victoria parte del puerto de la Mansa. Lleva el día entero e incluye tres distintas caminatas por la mayor de las islas del Nahuel Huapi. -Brazo Norte del Nahuel Huapi El “Patagonia Argentina” suelta amarras rumbo a los brazos Norte del lago. Es un paseo de dos horas que permite ver la desembocadura del Correntoso, la isla Fray Menéndez y se adentra en los brazos Rincón, Ultima Esperanza y Machete. Su realización está sujeta al buen tiempo y condiciones de visibilidad suficientes. ·Paseos en Velero El lago Nahuel Huapi es un azul profundo; el silencio deja oír los chillidos de las gaviotas y hasta los diálogos lejanos en la playa; sólo se escucha el suave chasquido del agua al ser continuamente hendida por la proa de un velero que se mueve al único impulso de la brisa. La experiencia no tiene comparación y tal vez por eso ha crecido la cantidad de prestadores de este servicio turístico en la zona de Villa la Angostura. Con base en bahía Mansa y su sólido muelle mayor o en puerto Manzano, hay en este momento unas cuatro embarcaciones autorizadas para llevar turistas en paseos que habitualmente se pactan entre una y tres o cuatro horas de duración según la disponibilidad de tiempo o el deseo de los pasajeros. Los veleros son de buen porte, con sanitario a bordo, elementos de seguridad y salvavidas, además de la obligada supervisión de Parques y Prefectura ya que para ser habilitados tuvieron que cumplir numerosos requisitos. Conviene, igualmente, pedir a sus timoneles la correspondiente constancia. Estas embaracaciones están provistos además de motor, que se utiliza para las maniobras de zarpado y amarre o cuando el viento es nulo o escaso e impide el despliegue del velamen. Como contrapartida, sólo la lluvia o el viento fuerte harán imposible la partida por cuestiones de seguridad. Los veleros salen del fondo de las bahías en general con la fuerza de sus motores, navegan paralelamente a la costa, a buena distancia, a lo largo de la península Quetrihué, casi hasta la punta donde está el bosque de Arrayanes, aunque no tienen permitido el desembarco allí. Las laderas a pique y el frondoso bosque pueden apreciarse con claridad, lo mismo que avistar o aun echar el ancla en pequeñas y encantadoras bahías, para tomar sol en la cubierta mientras la nave se mece suavemente. A la vuelta, con las velas desplegadas, la aventura es completa. Usualmente el timonel elige la costa opuesta a la de la ida, para el caso de este ejemplo, la zona de Manzano, Cumelén, Las Balsas, con posibilidades, prismáticos mediante, de observar lujosas residencias y los techos franceses de El Messidor. ·Motovelero Anna Desde el Muelle Viejo, en Bahía Manzano, parte el motovelero Anna, una histórica embarcación de madera que perteneció a la directora María Luisa Bemberg. Hay salidas de medio día, día entero, salidas especiales y al atardecer desde las 19 a las 21. Las salidas de día entero comienzan a las 9 de la mañana y finalizan a las 19. ·Puerto Angostura El Puerto Angostura, fue construido por Parques Nacionales en la década del ´40 durante la gestión del arquitecto Bustillo y está realizado totalmente en ciprés. Desde aquí parten muchas de as excursiones lacustres, y es utilizado también para las caminatas y paseos, por la gran belleza que ofrecen los reflejos del paisaje en el lago. |