Se equivocaron los que anunciaron que el petróleo llegaría a los 100 dólares por barril antes de que terminara el 2006 y también erraron lo que, a finales del año pasado, dijeron que era un disparate.

La cotización del crudo puede cambiar a cada hora, pero desde que comenzó a subir hace unas semanas no ha pasado un día que no cerrara en alza.

El gobierno de Néstor Kirchner volvió a echar mano a las retenciones para evitar que las fluctuaciones del mercado internacional influyeran en el precio doméstico de las naftas que, como se ve, siguen aumentando, y en el interior del país, más todavía.

Lo novedoso y más criticado de este aumento de las retenciones es que no se tocó la alícuota sino que se impuso un ingreso fijo a las petroleras. Lo que queda de la renta va al Estado.