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Costos bajo presión

La fuerte demanda mundial eleva el valor de los commodities industriales.De esta manera crecen los precios de los insumos que usan las empresas locales. El petróleo, uno de los commodities que más subieron en los últimos meses.

Una de las preocupaciones de los empresarios con miras al 2008 es el incremento de los costos. Los precios de los principales insumos para la producción local subieron en los últimos años y se espera que cuando menos se mantengan en los valores actuales, destaca un reciente informe de abeceb. En un contexto de aumentos salariales y con la probabilidad de que durante la próxima administración se autoricen algunos incrementos en las tarifas de servicios públicos, el horizonte de costos es alcista.

Los precios internacionales de los principales commodities se encuentran en niveles records. Aunque por un lado este fenómeno reporta un beneficio importante para el país por los altos precios de sus exportaciones, por otro impacta negativamente en los costos de las empresas locales.

Los precios de los principales insumos con mercados extendidos a nivel internacional evidenciaron un incremento sostenido desde el 2001 y existen indicios de que esa presión alcista se mantendrá en el 2008. La mayoría de estos productos mostró sus mayores incrementos en el 2004. Se creía que era una situación coyuntural y que suavemente los precios irían descendiendo. Sin embargo esto no sólo no sucedió sino que por el contrario se mantienen, en general, en esos niveles y con leves alzas.

En los precios del petróleo, el cobre, el acero y el aluminio se observa el fenómeno mencionado. En la mayoría de los casos, el crecimiento mundial sostenido y la aparición de China como demandante de estos productos para alimentar el crecimiento de su industria forzaron el aumento. En lo que respecta al crudo, han incidido también factores geopolíticos como la guerra en Irak o los conflictos en Nigeria e Irán, que siguen presionando al alza e hicieron que esta semana el barril tocara los 89 dólares, aunque la mayoría de los analistas consideraba que iba a cerrar el año a un promedio de 66,2.

En cuanto al cobre, se esperaba que ante una desaceleración mundial los precios cayeran; no obstante, en las últimas semanas mejoraron las expectativas de crecimiento chino y mundial, de manera que se estima que continuará en niveles similares al promedio del 2007.

 



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