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\"Hermanados\" con el triunfo | ||
Los Napolitano fueron claves en la victoria de Roca sobre el "Rojo". |
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NEUQUEN (AN).- No fue un clásico más el que se disputó en la calurosa tarde de ayer en Centenario. Por un lado, porque Deportivo Roca ganó de visitante, 2-1, y es más puntero que nunca. Por el otro, porque la victoria del "Naranja" desnudó el frente de conflicto que existe en Independiente. Roca mostró ser un equipo maduro y cada vez más acoplado. Pegó dos veces en la primera parte, por intermedio del "tapado" David Napolitano, y después supo mantener la diferencia. Ya suma cuatro victorias en la misma cantidad de partidos y su presente no puede ser mejor. En el "Rojo" todo lo contrario: después del partido Sergio Ciattaglia habría mantenido un encontronazo verbal con el técnico Gustavo Coronel que, al parecer, provocaría el alejamiento del "Gringo". (ver aparte) En lo estrictamente futbolístico, hubo un tiempo para cada uno. Es cierto que el "Naranja" no fue muy superior en los primeros 45, pero le sacó jugo a las situaciones que tuvo y se fue al descanso 2-0. Los minutos iniciales sirvieron para medirse, y desde ahí el que mejor leyó las coordenadas del juego fue el visitante. Bien parado atrás, y con Gustavo Guevara como el patrón de la mitad, Roca se puso rápido en ventaja. Fue a los 14, cuando el propio Guevara jugó veloz y con viveza un tiro libre para dejar cara a cara con Ciattaglia a Napolitano, que fusiló al "1". El "Depo" puso el balón bajo la suela y empezó a moverla. Independiente no halló un conductor y por ello careció de profundidad. Igual tuvo dos chances claras: una buena atajada de Velázquez a Cella Ruggeri y una mala definición de Nicolás Finesi. Roca fue más incisivo en ataque, por el vértigo de Sáez y la conexión de los Napolitano. Fueron estos dos los "culpables" del segundo tanto: Diego metió una pelota perfecta y David no falló. El segundo fue otra historia, porque Coronel movió el banco y se la jugó con un 3-3-2-2. El "Rojo" se plantó en el campo del líder y comenzó a generar situaciones. Por momentos abusó de los pelotazos, pero paradójicamente así llegó el descuento: iban 17 minutos cuando cayó un tiro libre en el área, hubo un mal rechazo y, con un disparo pifiado, Pablo Costi puso el 2-1 y le cortó un invicto de 332 minutos con la valla invicta a Velázquez. El local fue en busca del empate con más actitud que fútbol. Incluso le anularon un gol a Cella Ruggeri y Sablich sacudió el travesaño de afuera de área. Así se extinguió otro clásico, teñido de "Naranja". |
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