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Boca se puso nervioso...

Jugaba bajo presión y se destapó con un 6-0 ante Banfield.

Tenía la presión de ganar para no dejar la punta a pedir del 'Rojo', y el 'Florencio Sola' de Banfield no es justamente uno de los reductos más accesibles. Pero ayer, Boca no se amilanó ni mucho menos.

Gracias a la efectividad de Martín Palermo, el 'xeneize' vapuleó al 'Taladro' por 6 a 0 y produjo su mejor actuación del Apertura.

Banfield se presentaba como un rival complicado, pero rápidamente sucumbió ante la amplia superioridad del equipo xeneize, que vuelve a compartir la punta con Independiente.

Por segunda vez en el año y en su carrera, el 'Loco' marcó cuatro goles, uno de ellos de penal, con lo cual se convirtió en el actor más destacado, pero lo cierto es que Boca funcionó a la perfección en todas las líneas y no tuvo puntos flojos.

Así fue marcando diferencias ante un adversario que no tuvo respuestas y se resignó a su suerte con mansedumbre.

Boca jugó un primer tiempo redondo, salió a imponer presión, ahogó la salida, no ofreció flancos débiles en ningún sector del campo y además tuvo la eficacia que le había faltado en partidos anteriores.

A los 5 Morel Rodríguez avanzó por la izquierda, ejecutó un centro larguísimo, falló Cristian Lucchetti y Palermo saltando por detrás, y de cabeza abrió el marcador. Banfield pudo haber igualado dos minutos más tarde, pero salvó Paletta en la línea cuando pareció que el gol era inevitable.

Sobre los 21, en una muestra de desconcierto en el equipo local, Pablo Ledesma robó la pelota en las puertas del área, cedió para Palermo, que sin marcas, definió ante la salida de Lucchetti para el 2-0.

Seis minutos más tarde, Gracián se le escapó a Daniel Quinteros por la izquierda y el jugador local lo manoteó dentro del área. Penal que convirtió Palermo en su tercera conquista personal.

El cuarto gol llegó a los 37, cuando Palacio ganó por la derecha y tocó hacia atrás para la llegada de Gracián, quien de frente al arco venció a Lucchetti.

Si alguna esperanza le quedaba a Banfield para el segundo tiempo se le desvaneció muy pronto porque a los 2 minutos Ibarra disparó desde fuera del área, Lucchetti dio rebote y el infalible Palermo puso el 5-0.

Lo demás fue sólo por cumplir. Ni Boca se esforzó ni Banfield tuvo argumentos y apenas quedó para mencionar el sexto gol, a los 35, mediante un penal convertido por Ledesma porque Palermo ya no estaba en la cancha, después de una dudosa infracción de Ariel Broggi sobre Gracián. A Gracián justamente le cometieron los dos penales en la jornada en que a Boca todo le resultó ideal.



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