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Dole y Chiquita arman sus valijas | ||
Dejarán la producción y se concentrarán sólo en la venta. |
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Desde hace unos meses, el tema era comentario obligado entre los empresarios frutícolas chilenos. Las internacionales Dole y Chiquita ajustaron sus negocios en el vecino país, vendiendo terrenos o finalizando contratos de alquiler, para enfocarse completamente a la comercialización. La situación ha sido tan llamativa que la revista norteamericana "The Packer" llevó como tema de portada un artículo titulado "¿Adiós Chile?". El actual tipo de cambio, el alza en los costos de la mano de obra y la aparición de otros competidores en la región son los argumentos esgrimidos para justificar el proceso de ajuste que viven las firmas y que las ha llevado a enfocarse sólo en labores de traders. Mike Mitchell, vocero de Chiquita en EE. UU., afirma en el artículo que su empresa planifica reducir el tamaño de sus operaciones en Chile y vender algunos campos, plantas de packing y otros activos en los próximos meses. A esto se suma que hace algunos meses la compañía finalizó anticipadamente un contrato de alquiler de más de 2.000 hectáreas dedicadas a la producción de uva en la zona central. En el caso de Dole, David De Lorenzo, CEO de la firma en Westlake Village, afirmó que los salarios del sector se han doblado en Chile durante los últimos 5 años, lo que ha provocado una reducción en la producción de frutas y la puesta en venta de cinco campos, que esperan liquidar este año. Jonathan Bass, gerente de la compañía en Chile, describió el actual ajuste: "Nuestra estrategia es dejar de ser productores y reemplazar el volumen de uvas con productores independientes. Los otros productos, manzana, pera, kiwi y palta, siguen en crecimiento", dijo el ejecutivo, quien agregó que su empresa "sigue tan activa como siempre, menos en ser productora". El artículo también consignó las preocupaciones que hay en otras empresas como Del Monte. El vicepresidente de marketing de la firma, Dannis Christou, afirmó que existe una creciente competencia para Chile ante la aparición de otros actores como Perú y Brasil, que poseen menores costos. Consultados al respecto, dirigentes frutícolas del vecino país coinciden en que estas situaciones son señales respecto a que las firmas extranjeras han apostado por otros mercados que no poseen los problemas de cambio y mano de obra que ellos han manifestado constantemente. Y ante ese escenario, simplemente emigran a países más rentables. |
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