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El éxito de Victoria debe marcar un cambio | ||
Argentina tuvo un pobre papel en el Mundial de Cali |
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CALI (Por Luis Amaolo, especial para "Río Negro").- El subcampeonato que logró la neuquina Victoria Rodríguez López, y las dos medallas de bronce del resto del equipo, en el Mundial de patín carrera, no alcanzan para tapar la involución de la disciplina a nivel nacional, pero debería servir como punto de partida para producir un cambio profundo que todos anhelan pero nadie hasta el momento se atrevió a realizar. Tanto lo de Vicky como las preseas de Ornella Vícoli y el tridente marplatense Silvina Posada-Melisa Bonnet-Natalia Artero, son fruto del esfuerzo personal y nada tienen que ver con la realidad del patín argentino, cuya dirigencia lo aleja cada vez más de las principales potencias. Lo de Victoria es puro talento y perder un título del mundo por milésimas frente a superprofesionales, se acerca casi al "milagro". Pero también hay que destacar que a ese talento se le agregó un trabajo de varios meses por parte de su entrenador Marcos "Topo" López, que dieron resultados positivos. Rodríguez López evolucionó respecto a Aynang 2006 y todo hace pensar que el año próximo en Gijón, podría ser gran figura en juniors. Pasó Cali '07 y dejó varias marcas. La consolidación del poderoso equipo local, plagado de figuras; el crecimiento de la disciplina que tiene como objetivo convertirse en olímpica en el 2009; la pasión de los colombianos con su apoyo incondicional al certamen y el nuevo ídolo, el estadounidense Joey Mantia, que se colgó siete oros. Lo del supercampeón Colombia -dueño del medallero y cómodo líder en la suma de puntos- no tiene demasiados secretos. Se trata de un trabajo serio desde hace cinco años, con un presupuesto de más de 500.000 dólares anuales. |
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