Hamilton se impuso en Hungría y anotó su tercera victoria en la F-1. McLaren sancionado, no sumó.

Lewis Hamilton hizo valer una polémica 'pole position' que obtuvo en la clasificación y ganó ayer un turbulento Gran Premio de Hungría para sacar más distancia sobre Fernando Alonso en la lucha por el título del mundial de Fórmula Uno. El inglés, al volante de un McLaren, se adjudicó su tercera carrera del año al superar por menos de un segundo a Kimi Raikkonen (Ferrari), con quien mantuvo una reñida lucha de principio a fin.

Nick Heidfeld (BMW-Sauber) completó el podio al figurar tercero y el español, bicampeón vigente, entró cuarto.

Hamilton dominó de punta a punta en una carrera marcada por la polémica. Su equipo fue sancionado -no pudo sumar puntos para el campeonato de constructores- por haber menoscabado la ronda de clasificación de Hamilton.

Cuando faltan seis carreras en el mundial de Fórmula Uno, Hamilton amplió a siete puntos su ventaja sobre Alonso en el campeonato de pilotos, 80-73. Alonso había obtenido el puesto de privilegio en la larga del sábado, pero los comisarios de la FIA lo bajaron cinco lugares tras dictaminar que deliberadamente hizo demorar a Hamilton en la parada final de los pits.

Se determinó que Alonso estuvo frenado durante más de 30 segundos antes de volver a la pista tras el cambio de neumáticos, mientras que Hamilton esperaba su salida de los pits.

Según el jefe de la escudería, Ron Dennis, la culpa fue de Hamilton por ignorar las órdenes para que dejara pasar a Alonso en la tanda. "Después de las clasificaciones, me preguntaron por qué no había hecho lo que querían que hiciera. Yo me expliqué y les dije 'he cometido un error, pido perdón y no se repetirá'. Luego comenté que estábamos los dos en primera línea y podíamos alegrarnos", contó el británico durante la rueda de prensa posterior a la carrera.

"Ron me dio una lección, la acepté y pensaba que Fernando haría lo mismo pero tengo motivos para pensar que no es así. Sigo sintiendo el mismo respeto por él, admiro lo que ha hecho estos años", aseguró antes de añadir: "Parece que desde ayer (sábado) no me habla, no sé si hay un problema. He hablado con todos en el equipo y he pedido perdón por si hice algo que no les gustó. Estoy dispuesto a hablar con él pero tampoco voy a correr tras él".

Según Hamilton, si no se apartó para dejar pasar a Alonso cuando se lo ordenaron fue para evitar que también le adelantara el Ferrari de Kimi Raikkonen, arriesgándose a que el finlandés arruinara su tanda clasificatoria. "Luego me dijeron que le dejara pasar pero ya estaba a kilómetros de distancia", aseguró.

McLaren se mantiene al tope de la clasificación de constructores con 138 puntos, en tanto que Ferrari suma 119. Entre los pilotos, Raikkonen y el brasileño Felipe Massa (Ferrari) escoltan a sus rivales de McLaren al acumular 60 y 59 puntos, respectivamente.

En el circuito húngaro, uno de los más difíciles para intentar el sobrepaso, Hamilton lideró la carrera en todo momento y Raikkonen hizo el esfuerzo, se ubicó a menos de un segundo a una docena de vueltas del final, pero no pudo "limar" la diferencia a menos de medio segundo.

Los equipos y pilotos tendrán ahora una pausa de tres semanas antes de la próxima prueba, el GP de Turquía en Estambul, a correrse el 26 de agosto.

En ese espacio de tiempo, la FIA tendrá las manos llenas con la polémica sobre las denuncias de espionaje entre Ferrari y McLaren, además de la apelación por el castigo aplicado a McLaren que no sumó ayer.