una membrana para la aislación de paredes, pisos o techos es una lámina de varias capas, compuesta por distintos tipos y proporciones de materias primas, según el destino y el espesor deseado de acuerdo con el proyecto y los requerimientos que el arquitecto considere importantes.
A simple vista todas pueden parecer iguales porque tienen asfalto, polietileno o aluminio, pero hay diferencias muy notorias entre ellas.
A los materiales básicos con los que se fabrican prácticamente la mayoría se agrega también la malla geo-textil, que es una trama sintética no tejida de alta resistencia, que se usa para la fabricación de algunas de las membranas transitables.
En función del material y según los diferentes usos. en el mercado nos encontramos con membranas “aluminizadas” para azoteas no transitables, “normales” para colocar debajo de baldosas, “membrana geo-textil” para cubiertas transitables con terminación en colores, “mineralizada” para lugares transitables y con alma de fibra de vidrio y una película granítica y finalmente “espumadas”, que tienen en su composición asfalto modificado, polietileno, espuma térmica y una lámina reflejante. En la reciente feria Batimat Expovivienda, y como ocurre habitualmente, hubo un sector destinado a estos materiales y diferentes empresas expusieron una gran cantidad de productos, y algunas presentaron novedades.
En este sentido Isolant sumó a su larga lista de productos la nueva membrana “multicapa”(ver aparte) que está conformada por un sistema de más capas si se la compara con las versiones anteriores de su fabricación.
Por su parte Ancar, mostró su nuevo producto de aluminio laminado de alta resistencia a la tracción y al impacto, que fuera presentado como “la membrana del futuro”(ver aparte).
El grupo Gutta de origen italiano, expuso todo su catálogo de productos del tipo membranas para la aislación, que incluyó placas bituminosas con varias capas, membranas protectivas bajo tejas, membranas con nódulos, polietileno reticular expandido antirruido de impacto o con plomo, y polietileno reticular con fibra en poliéster fonoabsorbente, entre otros.
Y también estuvieron las propuestas de firmas como Tecno Aislantes que comercializa los productos de la rama Thermo Foil, con sus diferentes variantes que llegan hasta la última versión “premiun block” que intercepta el 97 por ciento de las radiaciones contando con varias cámaras intermedias de aire encapsulado.

“MEMBRANA DEL FUTURO”

Otra de las versiones renovadas que vieron en Batimat Expovivienda fue presentada por la firma Ancar. En este caso se la presentó como “la membrana del futuro”: se trata de una membrana “de aluminio laminado de alta resistencia a la tracción y al impacto”, según explicaron sus promotores.
Este producto está conformado por cinco láminas superpuestas de polietileno, asfalto plástico, polietileno reforzado, nuevamente asfalto plástico y una cobertura final superior de aluminio.
Entre otros productos de esta firma están la membrana geotextil transitable elaborada con láminas preconformadas de geotextil superior, asfalto plástico, polietileno reforzado, otra capa de asfalto plástico y una inferior final de polietileno. Esta serie se produce en lo que se podría definir como tres variantes: geotextil expuesto(la antes detallada), sin aluminio y alma de geotextil y con aluminio y alma de geotextil.
De acuerdo con lo señalado por sus fabricantes, “con la incorporación del poliéster se logran característica únicas en membranas asfálticas, ya que este material está compuesto por un conjunto de fibras largas de filamento continuo con un proceso de ligado por calor”.
Esto permite “total resistencia y elasticidad, estabilidad dimensional, gran comportamiento con los suelos, en obras de geotecnia. Además estas membranas se utilizan en techos o terrazas accesibles, y luego de colocadas se pintan con impermeabilizante acrílico de color, lo que le otorga una terminación estéticamente agradable”.

MAS CAPAS

Para la línea vivienda Isolant presentó en Batimat Expovivienda el nuevo modelo TBA multicapa, que es una membrana que “impermeabiliza y aísla térmicamente el techo, reemplazando la combinación de un fieltro asfáltico más un aislante térmico tradicional. Está conformada por un sistema de 5 capas que ofrecen mayor resistencia, mayor aislación térmica y triple aislación hidrófuga”. De acuerdo con lo manifestado por sus fabricantes “impermeabilizan y aíslan, tanto por masa como por reflexión, reflejando el calor descendente emitido por la cubierta en verano y reteniendo calor ascendente interno en invierno.
Las diferentes capas de este producto están formadas por aluminio puro con base de refuerzo, espuma isolant, bastones de ventilación, tercer capa hidrófuga antideslizante y una última capa de solape autoadhesivo del tipo “rapi-tac”.
Según las especificaciones señaladas por los fabricantes los bastones de ventilación van colocados hacia abajo, “creando los canales de ventilación. De esta forma se logra un techo ventilado debajo de la membrana, con una ventilación horizontal entre los bastons que confluye a la ventilación vertical ascendente del doble listón del techo”.

ADHERENCIA

Para colocar una membrana impermeable de base asfáltica hay que limpiar previamente la superficie de la cubierta, que debe estar seca y libre de polvillo. Luego se coloca un producto imprimante sobre toda el área del techo, además de las partes que sobresalgan; se deja secar y se limpia nuevamente antes de colocar la membrana.
La colocación se debe comenzar en la parte más baja de la superficie en sentido perpendicular a la pendiente, debiéndose calentar la membrana con un soplete, fundiendo el polietileno y superficialmente el asfalto. La adherencia se producirá con una suave presión manual.
Cada paño de material se colocará superponiendo un solapado no inferior a los 8 centímetros y entre los finales de cada rollo se solaparán unos 15 centímetros, según las sugerencias de los fabricantes de membranas para techos.
Por último se deberá realizar un “embabetado” en los salientes laterales, los conductos de ventilación o chimeneas con doble membrana para tener una mayor seguridad.
Para un cálculo del material los especialistas estiman que en un techo plano a la superficie del mismo conviene agregarle de un 10 a un 12 por ciento para realizar las tareas de solapado y babetas, en tanto que para uno de chapas onduladas el incremento sería el doble del mencionado.