China no está manipulando intencionalmente su moneda para obtener una ventaja comercial desleal, pero su acumulación masiva de divisas es un peligro para la economía mundial, expresó el miércoles el gobierno estadounidense en un informe. En un reporte semestral muy esperado, el Tesoro se abstuvo de calificar a Pekín como manipulador de su divisa, lo que podría desencadenar obligatoriamente sanciones, según la ley estadounidense. No obstante, el informe señala que la acumulación de divisas por parte de China está inundando de liquidez ese país y suscitando un riesgo de “explosión de la burbuja” de crecimiento que puede amenazar la economía global. El documento seguramente no desalentará, sin embargo, los esfuerzos de algunos congresistas para que se adopten sanciones contra China que, según ciertos legisladores, está manteniendo artificialmente subvaluada su moneda, el yuan. Por otro lado, el reporte expresa que, a pesar de la “fuerte intervención del gobierno en el mercado cambiario”, las autoridades estadounidenses concluyen que, si bien el yuan está subvaluado, “el caso no llena los requisitos técnicos para calificar” al gobierno chino como manipulador de su divisa. Según el informe, los funcionarios estadounidenses “no están en condiciones de determinar” si las políticas cambiarias “fueron llevadas a cabo con el objeto de impedir un ajuste de la balanza de pagos o para ganar una ventaja desleal en el comercio internacional”. Sin embargo, el reporte incluye severos comentarios sobre las autoridades chinas y afirma que una mayor flexibilidad de la tasa de cambio “es un tema de interés internacional y de responsabilidad, con implicancias críticas para el sistema mundial de comercio y el ajuste de desbalances mundiales”. El informe dice que la política de China ha llevado a acumular una gran masa de reservas en divisas que está inundando la potencia económica asiática. Esto incrementa la posibilidad de un sobrecalentamiento de la economía y “burbujas” de activos, de acuerdo con el estudio. El documento señala que el país está rebosante de liquidez, lo que conduce a bajas tasas de interés y sobrecapacidad de la industria, lo que puede terminar en un “aterrizaje brusco”. “Estas tendencias aumentan claramente el peligro de sucesivos ciclos de ‘explosión de burbujas’ que pueden resultar muy amenazadores para la economía mundial”, afirma el informe. La subvaluación de la moneda china hace más baratas sus exportaciones hacia Estados Unidos, lo que ha llevado a la pérdida de cerca de tres millones de empleos en la industria norteamericana y a un déficit comercial record de 232.500 millones de dólares el año pasado, además de perjudicar la competitividad estadounidense. A pesar de las crecientes protestas de algunos congresistas, el Tesoro se abstuvo en los últimos años de calificar a China como manipulador de divisas. Si Estados Unidos lo hiciera, se vería obligado a iniciar procedimientos formales para negociar con China la tasa de cambio del yuan que, según expertos, está subvaluada en más de un 40%. Y Pekín ya advirtió sobre las repercusiones de cualquier legislación que le sea impuesta por su política cambiaria.
|