La acción se desarrolla durante una cena de dos viejos amigos en una apartada mansión del campo. Hace muchos años –desde el auge del Imperio austro-húngaro– que no se ven uno al otro y, aprovechando el encuentro, pasan revista a lo que fue su vida de jóvenes y de no tan jóvenes. Y sobre todo, el papel desempeñado en su relación por la mujer de uno de ellos, ya muerta. Medido de modo perfecto, con sutilezas, el encuentro entre estos dos amigos, que ya tienen 74 años, va desplegando distintos aspectos de los sentimientos y las pasiones que dan forma al espíritu de los seres humanos. Y lo hace por medio de unos recuerdos y unos acontecimientos del presente que mantienen en vilo en todo momento, en una tensión que va creciendo hasta convertirse en una buena “adicción”.
Estamos hablando de “El último encuentro”, del gran escritor húngaro Sándor Márai, que por esa bendita recomendación de lector a lector ya va en su decimoquinta edición. Sin necesidad de que pasen grandes cosas, pero sugiriéndolas en todo momento, el autor consigue agarrar al lector por la solapa con la fuerza de las cuestiones que plantea en su historia y que afectan a todo el mundo. Leerlo hechiza, atrapa... por eso es que “eH!” lo recomienda para leer, ya.