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Las termas de Copahue
por ABEL SANDRO MANCA

Copahue y Caviahue están ubicadas al norte de la Patagonia, en la provincia del Neuquén en plena cordillera de los Andes, muy cercanas al límite con Chile. Caviahue (1.600 msnm) se encuentra a orillas del lago de su mismo nombre y a 358 kilómetros de la ciudad de Neuquén. A 18 kilómetros, muy próxima al volcán Copahue (2.925 msnm), se halla la famosa villa termal Copahue (1.920 msnm) que sólo funciona en temporada de verano (diciembre-mayo). En invierno las copiosas nevadas cubren gran parte de la villa y sólo puede ser visitada en excursiones especiales con vehículos adecuados.

Desde la antigüedad, diferentes culturas utilizaron sus aguas termales para aliviar distintas dolencias. Más cerca en el tiempo, sin infraestructura alguna, las termas se convirtieron en centro de descanso de visitantes extranjeros y de los habitantes de las provincias de Río Negro y Neuquén, que iban en busca de alivio para sus males, especialmente enfermedades cutáneas.

En la actualidad se ha instalado un centro de atención de alta complejidad, donde se combinan los antiguos baños termales con modernos centros de balneoterapia, con capacidad de 2.500 baños diarios. Un grupo de profesionales supervisa los tratamientos, con el fin de aconsejar los baños más convenientes, evitando así el peligro que representa utilizar estos bienes naturales.

Entre las aguas con distintas temperaturas pueden citarse: la llamada "soda" por su contenido de ácido carbónico; una fuente conocida como "agua de limón", muy apreciada por sus efectos laxante, favorece la función intestinal y es diurética; otra llamada "del mate", que brota a 78º y puede aprovecharse para cebar mate. Tres fuentes de aguas sulfurosas, de las cuales los médicos aconsejan la ingestión de un litro diario. Entre los barros curativos, uno de color blanquecino es aconsejado para las curaciones de enfermedades cutáneas; otros de color grisáceo sirven para los dolores reumáticos y unos de color rojizo se aconsejan como analgésicos. Los barros de la llamada "laguna del chancho" son desinfectantes y los de la laguna verde, muy aconsejables para aliviar las dolencias varicosas. Los vapores que se desprenden con fuertes ruidos y fumarolas son aprovechados para baños de vapor.

Durante el invierno se trasladan algunos recursos (fango y aguas) que son usados durante todo el año en el complejo de Caviahue y en el Spa Termal en Neuquén capital.

El nombre Copahue se lo traduce como "agua de azufre", varios estudiosos de las lenguas aborígenes lo aceptan como denominación del azufre. Don Alberto Vulentín, un estudioso de los topónimos de Neuquén ha dicho "que respeta esa etimología pero no la comparte" y señaló, entre otras cosas, que cerca del volcán Copahue hay unos arbolitos que los indígenas llamaban "copa", una planta con flores de color verde azulado. De allí dedujo el motivo generador del topónimo: Copahue, "donde hay copa". Además agregaba que Willy Hassler, gran viajero e investigador del Neuquén, le había hecho saber que los indios no llamaban copahue al azufre sino "choslahuen" o sea remedio amarillo (chos: amarillo y lahuen: remedio, medicina).

El volcán Copahue ha sido objeto de creación de leyendas. La más conocida es la llamada "Leyenda del Copahue", que figura en el leyendario neuquino.

La tradición mapuche narra la valerosa historia de un cacique llamado Copahue. Era muy poderoso, dominaba en ambos lados de la cordillera. Sus adversarios se aliaron para terminar con su predominio en una violenta batalla librada en Llay-Llay (palabra onomatopéyica que imita el murmullo suave del agua o viento).

Muerto el temible cacique su cuerpo fue enterrado en la parte más alta de la zona, que es la que actualmente lleva su nombre.

Su hijo mayor, que se llamaba como él, era tan cruel, feroz y despiadado como su padre. Reconstruyó su poderío, librando muchas batallas, en las que arriesgó la vida junto a sus guerreros.

Un día conoció a una joven y bella india hechicera llamada Piropillan ("nieve del diablo"), de la cual se enamoró, y se casó con ella. La tribu no la aceptó y fue finalmente atacado, dispersada su

toldería y muerto al anochecer. Su amada y un indio fiel llegaron ocultándose hasta el cadáver del cacique, lo llevaron y al amanecer se reunieron con un grupo de indios leales. Estos culparon a la joven hechicera de haber provocado la muerte de su esposo con sus amuletos y hechizos y le dieron muerte. La india, en su agonía, llamaba a Copahue, mientras los indígenas cavaban una profunda fosa. Pero de improviso fueron bañados por chorros de agua hirviendo. Según la tradición, ése fue el origen de las famosas termas.

Por encima de las controversias de la etimología de su nombre y de los relatos imaginarios sobre su origen, la realidad es que hoy podemos apreciar el pujante y permanente desarrollo del complejo turístico termal Copahue-Caviahue, apoyado por una creciente infraestructura hotelera que le permite ser un sitio ideal para el descanso de la psiquis y el organismo humano. Además ofrece la oportunidad de conocer una de las mayores manifestaciones volcánicas con fines curativos y contemplar un curioso y bello paisaje.

De ser conocida antiguamente sólo por los lugareños de ambos lado de la cordillera, hoy son famosas en el mundo entero.

 



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