Las pruebas realizadas en la zona muestran buen desarrollo.

El proyecto es entre Relmó, el gobierno local y productores.

El Valle Medio, con sus potencialidades, está desde hace rato en la mira de inversores y productores de todo tipo. La enorme cantidad de tierras sin cultivar, la cercanía a un efluente tan importante como el río Negro, la posibilidad de acceder fácilmente a vías de comunicación como lo son las rutas nacionales 22 y 250 y, además, contar con energía hacen de este sitio uno de los de mayor prospección en los últimos años. Como así también lo convierten en uno de los centros de mayor desarrollo para los próximos años.

Así, en la última década se han multiplicado y diversificado los cultivos y los métodos para mejorar los rindes y la calidad de los plantíos, que van desde la producción de cerezas a gran escala hasta papas para empresas alimentarias.

Ahora a estas experiencias se suma el proyecto Soja Patagónica.

Allí se hicieron durante esta temporada dos experiencias hasta ahora únicas. Estas fueron el cultivo de soja y de tomate con riego con pivot central (ver nota aparte).

En el caso puntual de la leguminosa, se trató de un proyecto en el que estuvieron involucrados varios actores.

CONVENIO CON EL GRUPO PROYECTO SOJA PATAGONICA

La idea de experimentar con soja en Valle Medio nació en setiembre del 2006, cuando se firmó un convenio entre el Ministerio de Producción de la provincia de Río Negro y el grupo de empresas aliadas tras el Proyecto Soja

Patagónica, representadas por el director de la empresa Relmó SA.

El objetivo del convenio es impulsar la experimentación y desarrollo productivo del cultivo de soja en Río Negro.

Para ello, la provincia se comprometió a realizar el apoyo institucional y político para la concreción de la iniciativa y el grupo del Proyecto Soja Patagónica a proporcionar los conocimientos adquiridos, desarrollar programas de trabajo, dar continuidad a la investigación y experimentación, realizar actividades de promoción, extensión y difusión. Estos ensayos debían conducir a genotipos de buen desempeño en la zona de riego.

Relmó es una de las empresas líderes nacionales en el campo del mejoramiento genético de soja y está dedicada desde el año 1962 a la investigación agrícola. Asimismo participan las empresas Rizobacter, Basf, Pla, Claas, Allochis y Bartoloni, que se suman al programa de trabajo.

EXCELENTE ADAPTACION

Gary Gordon, un productor involucrado en el proyecto, mencionó que "en su momento me llamaron desde el ministerio para saber si yo estaba dispuesto a colaborar con esta investigación. Les dije que no había ningún inconveniente. A raíz de esto se hizo un seminario en la sociedad rural de producción de soja. Ahí me puse en contacto con el presidente de la firma Relmó y sus técnicos y los llevé al campo. Les mostré además el sistema

productivo y les mencioné que estaba en condiciones de hacer un ensayo con riego bajo pivots de eje central. Así llegamos a un acuerdo de cuántas hectáreas se iban a afectar para esta experiencia. Ellos hacían el aporte de la semilla, la genética y los elementos de que no disponemos por no ser una zona sojera. Así designaron un técnico para hacer el seguimiento del proceso, desde la preparación del suelo, la siembra y toda las aplicaciones que había que hacerle a la plantación".

Agregó que "así se hicieron los trabajos. Y se sembraron distintas especies, para ver cuál se comportaba mejor en la zona. Así se prepararon 8 hectáreas para dejarlas para cosecha y 4 hectáreas para un nuevo concepto de hacer soja para alimento para ganado. Dado que la soja tiene mejores condiciones proteínicas, puede llegar en el futuro a suplantar al sorgo como una pastura para ganadería".

Sobre los resultados obtenidos indicó que "en cuanto a los rindes aún no se han hecho las mediciones. Así también, cuando se llegue al final de la película, se podrán conocer cómo fueron los costos finales. Por ahora se está llevando un planilleo muy fino de todo".

Y señaló que "lo que sucede es que hasta que no venga la cosechadora no se puede dar un balance o decir si estuvo bien o mal".

En cuanto a la adaptación de la soja a la comarca dijo "se dio de manera perfecta. Dado que vino un técnico especializado que se sorprendió más que nada por la nodulación que lograron las plantas en esta zona. Esto va a tener una explicación lógica y científica una vez que se analicen las condiciones geográficas. Y la relación con el riego, la temperatura, los milímetros aplicados, etc.".

Sobre cómo son los trabajos culturales de la soja con respecto a otras producciones dijo que "es muy simple. Los costos son posibles de sobrellevar en esta zona. Estamos haciéndolo con riego presurizado, por eso habría que ver cómo se adapta a un riego tradicional por inundación".

El productor dijo además que "la intención es llegar a la conclusión, ver los números y fijarse si encajan dentro de la rotación de cultivos, que estamos obligados a hacer para conservar los suelos, o como una alternativa de producción".