La tarde noche comenzó con una imagen rara, la de Ramón Díaz dirigiendo desde el banco local en la cancha de Boca. No duró demasiado el entrenador de San Lorenzo sentado en el sillón del dueño de casa con el escudo 'xeneize'. Si lo incomodaron los colores azul y amarillo, más lo hicieron sus jugadores dentro de la cancha.

Veintidos minutos esperó el equipo 'azulgrana' para ver la primera aproximación seria al arco de Belgrano, un tiro de Ezequiel Lavezzi que murió en las manos del arquero Germán Montoya. Ocho minutos después, Aureliano Torres probó desde más lejos aún y su tiro se fue desviado, por encima del travesaño.

Pero todo comenzó con Belgrano. A los tres minutos, Ríos avanzó con una diagonal de derecha hacia el centro y remató antes de ingresar al área, pero la pelota se fue por encima del travesaño. A los cinco, fue Marcelo Delgado quien probó con su marca registrada, el tiro de los 'tres dedos', pero resultó débil y errado.

Luego fue el turno de las llegadas del local hasta que a los 35, Belgrano se decidió a probar desde lejos: un disparo de Mansanelli que se perdió algo cerca del palo derecho del arquero 'azulgrana'.

El juego era poco atractivo y de ataques débiles. Por eso el gol de San Lorenzo, a los 41 minutos, fue un despertador de emociones. Ferreyra centró desde la izquierda, desvió de cabeza Serrizuela cuando Montoya iba arriba a cortar el envío. La pelota se elevó, superó al '1' cordobés y por detrás suyo ingresó 'Malingas' Jiménez, que convirtió el tanto de la ventaja 'azulgrana'.

El segundo tiempo comenzó como el primero, con Belgrano generando peligro, pero esta vez bien en serio, con Serrizuela acertándole al palo izquierdo de Orión con un tiro libre desde la derecha de la defensa de San Lorenzo. Iban apenas tres minutos de juego. Y como en el primero, pasaron 22 minutos hasta que San Lorenzo pateó al arco. Y fue Lavezzi tras una gran maniobra personal. El esfuerzo le quitó potencia y su remate resultó desviado.

Lo que siguió fue algo peor que lo ocurrido en la primera etapa, lo cual es mucho decir. Porque si durante los 45 minutos iniciales, la búsqueda fue desde larga distancia, en los siguientes 45, ni siquiera eso.

San Lorenzo intentó ampliar la ventaja, pero sin demasiado entusiasmo. Lavezzi se movió y trató de buscar a Jiménez, pero no lo encontró al delantero ni a nadie. Sólo Ledesma, el volante central 'azulgrana' mantuvo su nivel quitando y generando juego desde el mediocampo. Pero todo se diluyó cuando la ofensiva del equipo de Ramón tuvo que hacer su trabajo.

Igual, San Lorenzo se fue feliz, invicto y escolta a dos puntos de la cima.