El precio de la carne vacuna, que descendió alrededor del 4 por ciento durante este mes en el Mercado de Liniers, sigue mostrando subas en góndolas y carnicerías, aun en los cortes populares cuyo valor se acordó mantener entre el gobierno y la cadena comercial del sector.
Datos proporcionados por el Centro de Cómputos del Mercado de Liniers puntualizan que “salvo excepciones, los principales indicadores de precios del ganado descendieron casi diariamente, desde que comenzó este mes”.
Entre tanto, desde asociaciones de defensa de consumidores se vienen denunciando incrementos en los valores de venta del producto, así como desde el Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (IPCVA), que preside Arturo Llavallol.
El empresario y productor dijo a la prensa que este mes volvió a aumentar el precio de la carne vacuna, registrando picos de alzas de hasta el 9,43 por ciento, para cerrar diciembre con un promedio de subas de 5,06 por ciento. Mientras para Llavallol los estudios realizados desde el IPCVA revelan que esos aumentos realmente se registraron en reses en gancho y ganado en pie, directivos del Mercado de Liniers también analizaron el tema para poner algo de claridad sobre las diferencias de opinión.
En ese contexto, los directivos dijeron que “cada vez es menos” la hacienda que pasa por Liniers, y atribuyeron esa actitud de los productores a la “vigencia de listados con valores de referencia” para comercializar la hacienda y recordaron que “diariamente aumentan los remates directos” en los campos.
De cara a esa situación, consignatarios tradicionales que operan en el ente pusieron de relieve que, cuando las operaciones de venta pasan por ese andarivel –vender directamente a los frigoríficos en los campos– “generalmente se obtienen precios mayores” a los que se manejan en Liniers. “Quizá muchos carniceros, abastecidos por frigoríficos consumeros que compraron hacienda a mayor valor, no hayan podido absorber los costos más elevados, por lo cual pueden haberlos trasladado al consumidor final”, precisó el representante de una consignataria líder en el ente concentrador.
Por su parte, desde la Asociación de Propietarios de Carnicerías, Alberto Williams afirmó que los comercios minoristas se vieron “favorecidos” con los valores de las medias reses que están recibiendo, debido al “mantenimiento” de los valores para vender hacienda que se fijaron en los listados de “sugeridos”.
Entre tanto, un trabajo difundido por la Sociedad Rural Argentina (SRA) indica que el precio de la hacienda bajó en promedio 3,75 por ciento durante el tercer trimestre de este año, en el Mercado de Liniers.
No obstante, la entidad se ubicó en sintonía con los consumidores que denuncian subas en algunos supermercados, al señalar que en la plaza doméstica los valores del ganado en pie no llegaron a los consumidores.
Asimismo, especialistas en economía ganadera, vinculados a la consultora Informe Ganadero que dirige Ignacio Iriarte, ratificaron que este año, a pesar de la merma en el volumen de exportaciones de carne vacuna, los ingresos para el país serán similares a los de 2005.
Desde ese ámbito se aseguró, además, que en ningún momento faltó carne en el mercado interno por culpa de la exportación, sino todo lo contrario, ya que el excedente de animales gordos que no pudo exportarse se volcó al consumo local.

La identificación obligatoria para el movimiento de terneros y terneras nacidos en 2006 con cualquier destino comenzará a regir recién a partir del 2 de marzo de 2007 y no el 1 de enero como estaba previsto en un principio.
No obstante, los productores ya pueden concurrir a las oficinas de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentos para ampliar los datos del Registro Nacional Sanitario de Productores Agropecuarios (Renspa) y obtener la Clave Unica de Identificación Ganadera (CUIG).
En sus considerandos, la resolución 929/2006 indica que dicha postergación resulta fundamental para que el productor ganadero pueda dar cumplimiento a las exigencias que culminan con la identificación a que se propende.
El organismo sanitario nacional reiteró que aquellos productores que no tengan la CUIG estarán inhabilitados para mover terneros con cualquier destino a partir del 2 de marzo de 2007.

Reabren mercado japonés

El gobierno de Japón reabrió el mercado a las exportaciones de carne bovina chilena, luego de que el Servicio Agrícola Ganadero (SAG) informara a las autoridades niponas que entre los productos exportados se había detectado un caso de adulteración de certificación.
Al respecto, el ministro de Agricultura, Alvaro Rojas, expresó su satisfacción con la medida, que levanta la prohibición de ingreso de carne bovina y subproductos a Japón, cuya certificación sanitaria indica que han sido procesadas en una misma instalación. 
La información, que fue transmitida por el Ministerio de Salud de la nación nipona y comunicada al agregado agrícola de Chile en ese país, favorece directamente a todos aquellos establecimientos en origen que cuentan con inspección permanente del SAG y establece, además, que la restricción seguirá aplicándose a aquellas empresas que, por no cumplir con su procesamiento completo dentro de un mismo recinto, no cuentan con una inspección permanente del SAG.
La restricción impuesta temporalmente a la exportación de carne y subproductos bovinos chilenos a Japón se produjo a partir del 28 de noviembre, cuando el gobierno nipón suspendió la recepción de certificados sanitarios relacionados a estos productos debido a una misiva enviada por el SAG, con fecha 24 de noviembre, donde se informaba que entre los productos cárnicos exportados a dicho país se había detectado un caso de adulteración de certificación
Por su parte, el director del SAG, Francisco Bahamonde, explicó que para que el Ministerio de Salud de Japón levantara la restricción resultó esencial la exhaustiva investigación desarrollada en Chile, en los establecimientos exportadores que realizan todo el procesamiento de sus productos dentro de una misma instalación.