Pese a la presión ejercida por los productores, las empresas ya definieron no ajustar las liquidaciones de fruta de la temporada que está a punto de cerrar. Según trascendió, la mayoría de las liquidaciones entregadas se encuentra por debajo de los costos de producción estimados oficialmente. Para el próximo año no se esperan grandes cambios. Si bien los precios en destino están algo más firmes, mucha de la pera y la manzana que se coseche podría ir directamente a la industria. La situación del productor es realmente complicada. El modelo K, en definitiva, sólo ayudó a concentrar la actividad.
|