PUERTO MADRYN (AB).- A diferencia de lo sucedido en sus últimas cinco visitas a esta ciudad, Cruz del Sur no se volvió con las manos vacías. Rescató un valioso punto al igualar 1-1 en un partido intenso. El juvenil Sebastián Zambrano silenció a una numerosa parcialidad local que se encontraba en total clima festivo, con un gol a cuatro minutos del final.

El encuentro fue como se esperaba. Cruz del Sur se presentó con un esquema muy ambicioso proponiendo un peligroso golpe a golpe ante un rival con jugadores de reconocida experiencia en la categoría. Se sabía que Deportivo Madryn intentaría tomar las riendas del cotejo desde el inicio. Y eso fue lo que trató de hacer pero se encontró ante un adversario muy concentrado y ordenado. Subiabre y Galeano trataron de hacerse dueños de la mitad de la cancha pero Eduardo Pinilla y Mauro Aguilar estuvieron a la altura de las circunstancias y les presentaron dura batalla. Promediando la primera etapa, el árbitro Daniel Carluccio debió expulsar a Omar Ríos por una dura infracción contra Pinilla, pero salió del paso con una tímida tarjeta amarilla.

Para el segundo tiempo, el técnico Sergio Busciglio buscó variantes de arranque. Mandó a la cancha a Nicolás Gasperoni en lugar de Assam Ghislain, quien trabajó mucho en el "aguante" de la pelota pero no tuvo los espacios necesarios para desequilibrar. El ingreso del "Galgo" le otorgó más velocidad y desbordes al ataque barilochense. Precisamente él tuvo en sus pies una jugada neta de gol que increíblemente no terminó en la red. Quedó mano a mano con el arquero, lo eludió y terminó rematando por arriba. Y cuando se perdona en el arco contrario, habitualmente se sufre en el propio. Enseguida, Madryn consiguió la apertura con un cabezazo letal de Armando Mansilla.

Parecía que el golpe anímico era demasiado fuerte para Cruz del Sur y que la historia se cerraba con el marcador a favor del local. Sin embargo, hubo tiempo para algo más. A la carrera por el sector derecho, Sebastián Zambrano sacó un potente derechazo que pegó en el palo y entró.

En los instantes finales, el local fue un manojo de nervios tratando de encontrar el gol de cualquier manera. El "Cruzado" se dedicó a manejar la pelota y a "reventarla" cuando hizo falta hasta la indicación final del árbitro Carluccio.

No se produjo ese triunfo tan anhelado por Cruz del Sur en este territorio. Pero el empate fue casi tan festejado como una victoria. Porque fue en una cancha difícil y porque le permitió al Cruzado mantenerse en el lote de vanguardia, junto con Independiente y Boca de Río Gallegos.