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Buscan participación más activa del Central
El gobierno estaría evaluando modificar la Carta Orgánica para influir en los niveles de actividad.

La presidenta del BCRA, Mercedes Marcó del Pont, avalada por el Poder Ejecutivo nacional, intenta volver a poner en discusión una posible reforma de la Carta Orgánica del Banco Central.

La mirada está puesta sobre el artículo 3 de la misma, el cual afirma que "es misión primaria y fundamental del Banco Central de la República Argentina preservar el valor de la moneda".

Este artículo, vigente desde 1992, busca asegurar la independencia de la institución y enmarcar todas las políticas monetarias con el fin primordial de preservar el valor de la moneda.

La reforma apuntaría hacia un concepto más amplio respecto de la misión de la entidad monetaria, el cual incluiría como una tarea primordial del BCRA promover la creación de empleo y darle impulso a la economía.

Esta reforma ya había sido analizada por la actual titular del Banco Central, en su gestión como diputada, aunque la propuesta nunca llegó a tratarse. Aunque tampoco fue avalada por el entonces presidente del Banco Central, Martín Redrado.

Aquel proyecto planteaba el siguiente texto como reemplazo del actual artículo 3 de la Carta Orgánica: "Es misión primaria y fundamental del BCRA preservar el valor de la moneda, de un modo consistente con las políticas orientadas a sostener un alto nivel de actividad, y asegurar el máximo empleo de los recursos humanos y materiales disponibles, en un contexto de expansión sustentable de la economía".

Este mismo proyecto para reformar la Carta Orgánica establecía que, "en la formulación y ejecución de las políticas monetarias, financieras y cambiarias, el Banco coordinará su cometido con el Poder Ejecutivo, sin estar sujeto a órdenes, indicaciones o instrucciones de este último respecto del manejo de los instrumentos de su competencia".

De esta manera, la política del Central tendría objetivos más amplios que limitarse a defender el valor de la moneda de los efectos de la inflación o de una devaluación; además tendría que orientar sus políticas a variables vinculadas al empleo y a la producción. Es claro que el reemplazo, en febrero pasado, de Martín Redrado por Marcó del Pont planteaba en sus bases esta misma discusión.

Este proyecto se enmarca en la presentación del nuevo Programa Monetario, el cual debió ser detallado por Marcó del Pont ante la Comisión de Economía de la Cámara de Senadores. El mismo estipula una ampliación para el 2010 de $ 49.000 millones, que estarían en línea con las nuevas estimaciones de crecimiento: "La economía argentina que se había proyectado era de un crecimiento del 2,5%, pero de acuerdo a las mejores estimaciones del Banco Central no está creciendo al 2,5% sino que se proyecta un crecimiento en torno al 9,1%", explicó Marcó del Pont, de modo que la entidad monetaria modificó el programa "por qué se ve una economía que crece de forma más rigurosa" y bajo de la premisa de no enfriar el nivel de actividad económica.

Del mismo modo, la presidenta Cristina de Kirchner, durante las Jornadas Monetarias y Cambiarias del BCRA realizadas la semana pasada, defendió la postura mencionada en el párrafo anterior, asegurando que "no entiendo que un organismo del país pueda manejarse de manera autónoma sin prestar atención a lo que pasa en la economía". (Redacción Central)



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