Venían de una semana difícil y una victoria era vital para los dos.

Y fue Huracán el que golpeó en el momento justo y ganó por 2-1 un partido importante por la permanencia ante un rival que lucha por el mismo objetivo. La diferencia, además del triunfo, esta en que el futuro de Quilmes se oscurece cada vez más. El Cervecero aún no ganó, y está en el fondo de la tabla.

De todas maneras, el que comenzó de la mejor manera fue el dueño de casa. Al minuto de juego, gracias a un cabezazo de Santiago Hirsig tras un centro de Ariel Broggi, Quilmes de adelantó rápido y Huracán debió asumir un protagonismo que le quedó incómodo en todo momento.

El Globo fue una y otra vez, pero siempre chocó contra la defensa de un Quilmes, que a través del contraataque, pudo aumentar la ventaja.

A los 20´, el Cervecero tuvo el segundo, pero JJ Morales no pudo cabecear un centro de Varela, con el arco vacío. Cuando todo parecía que el primer tiempo se iba a ir con Quilmes como ganador parcial, llegó el empate. Corrían 47´ cuando "Matute" Morales asistió con un tiro libre desde la izquierda a Carlos Quintana, quien de cabeza puso el 1-1. Este empate parcial castigó la ineficacia de Quilmes.

En el ST, Huracán manejó mucho mejor la pelota, mientras que Quilmes no tuvo resto físico para presionar a su rival, ni ideas para progresar en ataque.

El quiebre llegó a los 29´, cuando Nieto sacó un remate desde afuera del área que se coló junto al palo derecho de Trípoli. Tocalli mandó a la cancha a Miguel Caneo para tratar de desnivel y fue el roquense el que asistió a Broggi sobre el final, pero el defensor no definió bien ante la salida Monzón.