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Chismes

Enfrentados.

 La última semana fue negativa para el gobierno, ya que hubo señales contundentes de los empresarios que le empezaron a dar la espalda.

Tal fue así que la propia Unión Industrial Argentina (UIA) emitió un comunicado diciendo que por "problemas de agenda" no iba a participar del acto del Día de la Industria efectuado en Entre Ríos, adonde concurrió la presidenta.

Un hombre importante de la central fabril no dio vueltas para definir la situación. "Es muy complejo el panorama actual. Sinceramente la política de confrontación que sigue llevando adelante el gobierno no va más", subrayó el ejecutivo.

Uno de los popes influyentes en la Bolsa de Comercio fue directo al grano. "Mientras en la mayoría de los países de la región se desviven por conseguir capitales del exterior, aquí los asustamos con todas estas peleas y marañas de decretos y juicios iniciados. Sinceramente, estamos perdiendo cada vez más oportunidades", puntualizó el ejecutivo.

Nuevas críticas a Moreno.

 A pesar de que interpreta el pensamiento kirchnerista como ninguno, Guillermo Moreno, secretario de Comercio Interior, está nuevamente en el ojo de la tormenta dentro del propio gabinete. Algunos asesores le insistieron a Néstor Kirchner en que la "sobreactuación" de Moreno en determinados momen-tos, como en Papel Prensa, son puntos que le restan al gobierno.

"Son tonterías. Hacerse el malo, fingir pelear, hasta cuándo con esas estupideces. No se dan cuenta en Olivos de que eso nos puede costar muy caro en las próximas elecciones", se quejó un importante asesor de Casa de Gobierno. El mismo asesor sostiene que Néstor Kirchner tuvo una importante recuperación de su imagen e intención de voto a partir de los festejos del Bicentenario, pero que en el último mes esa tendencia se estancó. "Hay gente que tiene que cambiar, pero el tema es que si el jefe no le pone un freno, quién entonces", concluyó el funcionario.



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