Ganaba Olimpo 1-0 y comenzaba un nuevo ataque contra la defensa de Gimnasia cuando todo oscureció. Iban 12 minutos del complemento. Pero sólo en el Roberto Carminatti, porque en el resto de Bahía Blanca había luz. El corte de energía que afectó al estadio del Aurinegro fue un paréntesis de media hora bajó el frío de unos pocos grados.

Antes, Olimpo fue superior a Gimnasia a fuerza de solidez y concentración. A los 21 minutos de la primera parte consiguió la ventaja a través de Marcelo Mosset, una ventaja que pocas veces estuvo en peligro y que a la larga fue decisiva.

En el complemento, el local siguió mandando aunque sin someter al Lobo hasta que se cortó la luz. A la vuelta, Olimpo pudo marcar tres veces, pero no lo hizo. Sessa le ahogó el grito Rolle.

El propio Rolle lo tuvo otra vez, pero de lujo: tras un gran desborde de Cobo Gálvez, el "10" taqueó la pelota y la definición se fue apenas desviada. La tercera chance clara de gol para el local una vez más la tuvo Rolle y una vez más el arquero de Gimnasia lo frustró tapándole la llegada por la derecha.