Para el director de la firma PAI, Roberto Garrido, la temporada se mostró muy cambiante. "Las expectativas en el inicio no estaban del todo claras: había altos stocks en los países del hemisferio norte, un consumo de rutas lento y veníamos de los coletazos del últimos crash financiero de fines del 2008. Después empezó a aclarar el panorama, observándose un mercado normal en general, lo que disipó las dudas iniciales", confió el empresario.

-¿A que se debió este primer cambio?

-Influyeron las mermas de cosecha de todo el hemisferio sur y, sobre todo, los importadores estuvieron mucho más cautos a comprar volumen.

-¿La reciente crisis en la Eurozona afectará a la región?

-Sin dudas que golpeará a la actividad. Se esperan nuevos problemas financieros en Europa que golpean al euro y esto nos preocupa. El escenario ahora es totalmente distinto a los anteriores que mencionábamos.

-¿De qué manera golpea?

-Con la caída del euro, serán menores los retornos. Si bien los remanentes por exportación que hay todavía en la región hacia este destino no son importantes, los cobros que faltan van a perjudicar a la actividad.

-¿Cuánto calcula que falta cobrar?

-Eso depende de cada empresa, pero se puede hablar, en promedio, de algo más del 50% del total comercializado y todavía a comercializar. Es una cifra significativa.

-¿Qué problemas ve al cierre del semestre?

-Yo creo que los dos principales problemas con los que vamos a tener que confrontar son los costos de producción y el financiamiento.

-Nunca hubo gran financiamiento para la actividad.

-Sí, es verdad. Pero esta temporada creo que van a ingresar menos divisas que el año pasado, por menores volúmenes exportados, y esto va a generar un faltante de dinero importante para la producción.