Tratar de cerrar el partido demasiado pronto, le costó muy caro al Tolo Gallego.

El DT, que suele sacar chapa cuando sus modificaciones cambian para bien el destino de un encuentro, equivocó ayer el camino en La Paternal.

Siete minutos después del 2-1 anotado por Gandín, Gallego sacó a Hernán Fredes, de buen primer tiempo, por Fernando Godoy ya con intenciones de reforzar la mitad de la cancha. Tras el 3-1 anotado por Núñez, sacó a la figura para hacer ingresar a Vallés en busca de más seguridad defensiva. Es decir, que el Rojo jugó más de 20´ con un doble cinco (Acevedo y Godoy) y ¡un doble cuatro! (Vella y Vallés).

Ayer al dejar el estadio, Gallego encabezó una triste hilera de cabezas gachas y se fue sin hacer declaraciones tras haber perdido la ilusión del campeonato.