UNQUILLO(Especial) - Nicolás Madero cumplió con su parte. Tenía que ganar la segunda etapa y lo hizo. Pero no se dio el milagro que necesitaba para ser campeón, porque una vez más el cordobés Federico Villagra ratificó su enorme capacidad para definir un título, logrando ayer en Unquillo el octavo en el Argentino que clausuró un nuevo certamen con la victoria de Gabriel Pozzo.

Madero encaró la parte final de la prueba clausura del Argentino superando a Villagra por un punto y medio, pero muy lejos de los puntos en la general, por lo que estaba frente a una misión casi imposible.

Es más, de nada sirvió la decisión del Tango Rally Team en el cierre del Día 1, cuando decidieron no presentar los autos del huinculense Alejandro Cancio y de Marcos Ligato al parque cerrado para que Madero ganara algunas posiciones, y reengacharse ayer para restarle puntos a Villagra.

Madero hizo su parte, el auto funcionó como necesitaba y se encargó de llevarlo rápido, ganando el Día 2, pero la estrategia no dio resultados. AbandonóCancio y Ligato no pudo con el "Coyote", quien terminó tercero en la etapa.

Encima, no se bajaron muchos en la general y Villagra con su segundo puesto terminó quedándose con el título al aventajar a Madero, que sólo sumo los cinco por ganar la etapa, por apenas 3,5 puntos. Madero estuvo muy cerca de la gloria, pero no supo aprovechar la diferencia con la que llegó a las dos últimas pruebas.

En Bariloche ganaba fácil cuando abandonó. Villagra achicó a apenas 5,5 puntos la diferencia.

En Unquillo se repitió la historia, aunque esta vez fue por los problemas de embrague que tuvo su auto, que lo marginaron de la pelea por el título cuando el pasado sábado tenía la situación controlada.

Seguro que Madero, por talento y edad, tendrá otras oportunidades para pelear un título, pero se le escapó uno que lo tenía casi definido. Villagra demostró que se agranda en las difíciles y que no se entrega nunca.