Al público hay que respetarlo y eso estuvo lejos de ocurrir en el festival de boxeo profesional en el club Del Progreso de Roca, con la anulación de dos de las peleas profesionales y una molesta demora porque la televisión no estaba lista a la hora indicada para empezar su trabajo.

El promotor Osvaldo Rivero fue increpado por las demoras, pero no dio explicaciones, como también los organizadores por la cancelación de dos de las peleas.

El otro tema fue el de las entradas. A los que pagaron 100 pesos por un ring side les tocó lidiar durante toda la programación con la falta de control, que permitió que grandes y chicos circularan o ocuparon los lugares destinados a una zona supuestamente preferencial.