Después de tanto amagar, finalmente Cipolletti pudo volver a la victoria y con una sólida actuación. Derrotó 2-0 a Villa Mitre en Bahía Blanca y se mantiene como único escolta a sólo un punto del líder Unión de Mar del Plata.

Hasta ayer el equipo de Perilli si bien acumulaba tres empates fuera de casa, no había marcado goles. En Bahía el negocio fue completo porque ganó su primer partido de visitante, se mantiene invicto en ocho fechas y recuperó el fútbol y la contundencia que tanto se le reclamaba al equipo.

Cipo comenzó a sacarse la mufa bien temprano. Apenas pasado el minuto, Hugol Prieto volvió a ser el del torneo pasado. Fresco como una lechuga e hiriente como una daga filosa, el allense tomó la pelota y salió disparado como un rayo. Llegó al área contraria mientras los defensores apenas alcanzaron a mirarlo, dejó en ridículo al espigado Germán Lanaro, metió un enganche y definió fuerte arriba para poner la primera diferencia.

El gol liberó futbolísticamente al equipo que tuvo un parcial de altísimo nivel. Antes de los 8 consiguió el segundo gol con una exquisita definición de Richi López Carrillo por arriba de Galant luego de una gran jugada que inició Lalo Porra, continuó Germán Alecha y definió el volante central.

El 2-0 potenció aún más el ánimo del albinegro que antes de los 15 tuvo dos más muy claras. Manolo Berra llegó a posición de gol y el arquero local lo atoró justo; y enseguida se lo perdió increíblemente Alecha abajo del arco.

Villa Mitre quiso reaccionar, pero siempre chocó una defensa más atenta que en otras tardes y un Raúl Ruiz otra vez determinante.

Con serenidad y experiencia supo llevar el resto del partido para abrochar otros tres puntos de oro.