El gobierno mantiene “alimentado” el mercado de dólares con el superávit de la balanza comercial. Los datos del cierre de agosto indican que el saldo comercial seguía siendo elevado –alcanzaba los 1.155 millones de dólares– aunque, a diferencia de los meses anteriores, experimentaba una fuerte caída con respecto a igual mes del año anterior, del orden del 50%.El único mes del 2009 en que se había producido una caída interanual del saldo había sido enero, pero la variación fue entonces sensiblemente menor: en torno al 27%. Datos oficiales expuestos en un reciente estudio de la consultora abeceb.com dan cuenta de que el mes pasado las exportaciones sufrieron una contracción interanual del 40%, que fue incluso superior a la de las importaciones, y en términos acumulados para los primeros ocho meses del 2009 ya se verificaba una caída del 24% de la pauta exportadora.Las importaciones, por su parte, volvieron a sufrir una fuerte contracción en agosto, en línea con lo ocurrido en los meses previos; esta vez la caída fue del 37%. Y para el acumulado de enero-agosto la contracción representó el 39%. Hasta julio, los flujos de comercio (suma de exportaciones e importaciones) exponían una contracción del 29%, sobre todo por el pobre comportamiento de las importaciones. En agosto, el flujo comercial cayó diez puntos más (39,2%), por lo que se puede decir que aún estamos lejos de divisar una etapa de recuperación comercial para la Argentina.En los primeros ocho meses del 2009 el saldo comercial acumulaba 12.332 millones de dólares, un 45% superior al acumulado del mismo período del 2008, cuando había alcanzado los 8.517 millones.Este dato para la micro del programa económico sirve: mantiene con liquidez el mercado cambiario con los dólares que llegan del exterior, una variable que permite que el Banco Central no liquide sus reservas para sostener la paridad.Pero para el mediano plazo forzar el corte de importaciones –que es en definitiva la estrategia que está implementando el gobierno para contar con dólares– terminará por afectar el aparato productivo local, que necesita ser abastecido por insumos del exterior. (Redacción Central)
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