Postulada por el gobierno provincial como la obra que solucionará los problemas de abastecimiento de agua potable de la ciudad durante los próximos 50 años, la construcción del canal Mari Menuco avanza a buen ritmo y se espera que a partir del año entrante sea la fuente del agua que consuman todos los neuquinos.

Si bien la obra en sí es conocida como el canal Mari Menuco, sólo cinco kilómetros de su estructura corresponden al canal a cielo abierto destinado al riego agrícola, dado que los 47 kilómetros del canal que trae a la meseta capitalina el agua del río Neuquén para el consumo humano se encuentra totalmente entubado, con cañerías tan amplias que una persona ingresa parada y cómoda en su interior.

Las empresas contratadas por el gobierno provincial se encuentran actualmente culminando la construcción de la imponente planta potabilizadora que, desde la zona de Nueva Esperanza, abastecerá a toda la ciudad.

En tanto que desde el mes pasado se trabaja en la construcción de los tres nexos que permitirán unir el actual tendido de acueductos de la ciudad a la mega planta potabilizadora.

El nuevo sentido en que correrá el agua

Esa unión, en la que también se incluye la creación de tres enormes cisternas sobre la zona de bardas con una capacidad superior a los 20.000 metros cúbicos, invertirá el sentido en que el agua circula por la ciudad, haciendo que el agua ya no sea captada en el río y bombeada hacia arriba de la barda sino que, fundamentalmente por depresión, bajará desde la meseta hacia los barrios del sur.

Este cambio, que se asegura ocurrirá en mayo próximo, implica que la ciudad pasará a contar en pleno verano con el doble de la cantidad de agua disponible, al pasarse de los 7 metros cúbicos que por hora se bombean actualmente a los 14 metros cúbicos hora que suministrarán los tres nexos de la meseta.

Una obra más que esperada

Tras tres veranos en los que la falta de agua potable llevó a cientos de vecinos a protestar en la calle reteniendo incluso a varios colectivos de la empresa local Indalo, el cambio anunciado es más que esperado, sobre todo en los barrios que verano tras verano se vieron más castigados por la falta de presión y los cortes de servicio.

La obra que suministrará el vital líquido a la ciudad demandó en estas primeras etapas una inversión de 280.000.000 de pesos, de los cuales 200.000.000 correspondieron al sector del canal y la planta potabilizadora y 80.000.000 están actualmente invirtiéndose en los nexos exclusivos para la localidad.

También a ciudades cercanas

Una vez finalizada la conexión de la ciudad, desde el gobierno provincial se anunció que se procederá a construir los tendidos hacia las ciudades de Plottier y Centenario, y se abrirá un nuevo segmento que canalizará agua cruda del río Neuquén hacia la meseta en donde se podrán comenzar a regar 30.000 hectáreas que hasta el momento permanecen improductivas y que, se espera, puedan elevar en forma más que significativa la capacidad productiva primaria de la provincia.