Cuando el trinner comenzó a masajear la espalda del gigante, el final se vislumbró. Los gestos de cansancio y dolor de Juan Martín del Potro se tornaron indisimulables y en ese momento Andy Murray entendió que debía dar el zarpado. No falló. Ya como nuevo número 2 del mundo, el escocés de dientes filosos y cara de asesino serial se quedó con la final y el trofeo más importante del Masters 1000 de Montreal (6-7 (4-7), 7-6 (7-3) y 6-1).

De su paso por Canadá, Delpo se llevó 222.000 dólares en premios, 600 puntos para el ranking y la cabeza repleta de dudas. Además, perdió la chance de volver a ser el 5 del planeta tenístico, por lo que Andy Roddick seguirá arriba suyo.

Las últimas semanas fueron intensas para el mejor tenista argentino, que acumuló mucho cansancio y por ello ahora tendrá que pensar seriamente si participa del Masters 1000 de Cincinnati que se pone en marcha hoy y que lo encontrará debutando en segunda ronda.

Sucede que el gran desafío para él es tener un buen US Open, que se juega en superficie dura y tiene como fecha de inicio el 31 de este mes.

Fue realmente una injusticia que la historia de Delpo en el Masters de Montreal se cerrara con un 6-1 que hoy por hoy no refleja para nada la diferencia que existe entre el muchacho argentino (20 años) y el muchacho británico (22).

Hubo dos partido en uno: el que se disputó hasta el 5-5 del segundo set y lo que vino después, con un Juan Martín exhausto y atacado por fuerte dolores en la espalda y el brazo derecho. El argentino apeló a sus últimas energías, expuso coraje y estiró el desenlace de ese parcial hasta el tie break, que se esfumó con un 7-3 a favor del británico. A esa altura, la suerte ya estaba echada.

El primer set fue muy parejo y sólo el trajinar de los partidos anteriores (venía de vencer a Rafa Nadal y Andy Roddick) parecían detener el tenis de un Del Potro fino, preciso, agresivo, insistente. Murray resistió y mostró solidez al sacar, pero sucumbió en el tie break cuando Delpo consiguió un mini break clave para colocarse 5-4 y, con su saque, sellar el 7-4.

El 2 del mundo no se cayó y quebró en el inicio del segundo parcial, el argentino recuperó terreno en el juego siguiente y fueron golpe a golpe hasta llegar al 5-5, cuando al gigante de casi dos metros se le partió la cara de dolor.

Luchó para intentar la hazaña de cerrar el partido y no estirar la "agonía", pero se le escapó el tie break y su sueño de ganar el primer Masters 1000 comenzó a diluirse.

Lo asistió el médico, Franco Davín elevó plegarias, pero la situación no se revirtió. Murray quebró dos veces y se colocó 4-0 rapidez, Delpo recuperó un poco de su tenis en el quinto game, pero volvieron a abandonarlo las fuerzas y así se le escapó el título, el que hubiese sido el séptimo de su carrera.

El escocés no se apiadó, cortó una racha de 11 victorias en fila del criollo y volvió a derrotarlo como lo hizo en el Masters 1000 de Miami. Murray suma 30 victorias y cinco coronas en lo que va del año.