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El escenario era predecible.Llegar a tener que pagar en cuotas los salarios estatales es consecuencia de la mala gestión de la administración Sapag.La última vez que un aguinaldo no se pagó en tiempo y forma fue en diciembre del 2001. La provincia, en aquel entonces, era arrastrada por la crisis política y económica más importante que registraba el país en su corta historia. Las cuentas nacionales estaban desahuciadas, las cuasi monedas abundaban en el mercado, las transferencias por coparticipación no llegaban al interior y los gastos corrientes se mantenían consolidados en lo más alto. En ese 2001, también el escenario era predecible.Pero entre aquel momento y el actual existen grandes diferencias como para hacer simples comparaciones.Hoy, la situación de la provincia está complicada. En el plano económico la administración de Jorge Sapag enfrenta problemas externos e internos. - Los últimos están enmarcados casi exclusivamente en la gestión del actual gobierno neuquino. Nadie puede terminar de explicar cómo una provincia con una población en torno de los 500.000 habitantes y un presupuesto superior a los 6.500 millones de pesos puede tener problemas en sectores de servicios públicos clave como es el caso de Salud y Educación, sólo por nombrar algunos casos. Río Negro, por dar un ejemplo cercano, tiene más habitantes y maneja un presupuesto 35% inferior al neuquino, con crisis social y económica de mucho menor impacto.
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