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Otra Bullock

LOS ÁNGELES (DPA) - Siete años después de protagonizar "Una segunda oportunidad", la reina de las comedias románticas, Sandra Bullock, regresa a la pantalla grande con "La puesta", que se estrenó ayer en la región.

Bullock encarna a Margaret, una poderosa e inflexible editora de libros que al enfrentar problemas de visado se aprovecha de su devoto asistente Andrew (Ryan Reynolds), a quien ha maltratado por años y finge un compromiso matrimonial para resolver su eminente deportación a Canadá. Andrew acepta formar parte de esta farsa siempre y cuando ella cumpla con algunas de sus condiciones. Muy al estilo "Green Card" de Peter Weir, la pareja se ve obligada a compartir un fin de semana en Alaska para comunicar las nuevas a la familia de Andrew.

Margaret, una perfeccionista, solitaria y a la vez un tanto reprimida e insensible, que no para de meterse en líos y situaciones cantinflescas, al final descubre que lo que realmente importa es el amor a otras personas. Tras una boda apresurada y con oficiales de inmigración en su búsqueda, la pareja decide mantener el plan inicial de contraer nupcias.

A pesar de que Bullock asegura que Reynolds y ella llegaron al mismo tiempo al proyecto, es bastante obvio que la gran protagonista de la cinta es ella. Sin embargo, el protagonista de la serie de televisión "Two Guys and a Girl" no es un novato del género. Reynolds, en menor grado, también cuenta con una amplia experiencia en comedias.

Curiosamente, esta vez Bullock no realiza el papel de la niña buena con quien todo el mundo simpatiza. Encarna por el contrario a una jefa despiadada.Otro elemento que se desvía del repetido patrón de las comedias de Bullock es el hecho de que la protagonista se enamora de un hombre más joven que ella. Para la popular actriz de "Miss simpatía" no se trata del estereotipo de la mujer mayor aprovechándose de un hombre más joven, sino que más bien quiere creer que en este caso un joven es capaz de reconocer talento y encanto en una mujer mayor.

El otro componente nuevo de esta comedia de Bullock es que marca la primera vez en que realiza un desnudo y curiosamente se trata de una escena divertida, no romántica. Margaret, al salir de la ducha, se tropieza accidentalmente con Andrew, que también está sin ropa."Si voy a hacer mi primera escena de desnudo tiene que ser divertida. No me importa. Así la gente no puede decir que tengo un cuerpo terrible, fue divertido", confesó Bullock.

Es probable que ésta no sea la película más taquillera de Bullock, pero es una cinta divertida dirigida a un público muy específico que cumple con las expectativas: es una comedia romántica.



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