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Ser artista, joven y con pocos recursos no es una fácil combinación. Quizás por eso dos argentinas amantes del arte empezaron Gallery Swapping, una iniciativa que promueve el intercambio de espacio artístico entre galerías de arte de todo el mundo para mostrar el trabajo de artistas emergentes. "Estos son artistas con mucho reconocimiento local. Tienen entre 22 y 35 años, pero les falta la salida al exterior. Se les debe eso a todos estos artistas jóvenes´´, explicó Carmen Ferreyra, una de las directoras del proyecto, a la AP.
Galerías de todo el mundo pueden convertirse en miembros de la iniciativa llenando un formulario a través del portal de Internet del programa. Después de recibir una confirmación, la galería puede elegir la ciudad del mundo donde quiere que se expongan las obras de sus artistas seleccionados. Cada ciudad tiene una lista de galerías miembro dispuestas a ofrecer su espacio para futuras exposiciones. Intercambios así se realizan desde hace años, pero muy pocos se dedican a la promoción de artistas jóvenes, que casi no han mostrado su trabajo en el extranjero.
"Sabemos lo difícil que es emigrar a otro país y empezar desde abajo. Lo siento casi como una misión poder ayudar y poder mostrar lo que es emergente de nuestros países´´, explicó Ferreyra, de 32 años, quien estudia historia del arte y francés en la Universidad de Columbia.
Tras nueve años en Estados Unidos, Ferreyra se ha integrado de lleno en la actividad cultural estadounidense y se ha convertido en la encargada de logística de Pinta, la Feria Latinoamericana de Arte Moderno y Contemporáneo de Nueva York. Mientras Ferreyra se dedica a escoger galerías, realizar acuerdos con ellas y coordinar las exposiciones, Celeste Najt se centra en el aspecto técnico del proyecto desde Buenos Aires, seleccionando artistas y presentando ideas para nuevas muestras.
"Conectamos arte y cultura´´, dicen ambas en el portal de Internet del programa. Gallery Swapping ha empezado exponiendo en Estados Unidos obras de artistas emergentes latinoamericanos como Catalina León, cuyo trabajo forma parte de la colección del Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires, o Cristian Velasco, un joven chileno que ha expuesto en el Museo de Arte Contemporáneo de Chile.
El proyecto también ha mostrado las obras de Luciana Rondolini, que expuso en el festival Buen Día de Buenos Aires y de Nicolás Mastracchio, que ha llegado a tener sus propias muestras en galerías de la capital argentina. "Todos están muy unidos por el collage digital o manual. Todos, de alguna manera, reciclan lo que ya existe. Sus obras tienen que ver con la falta de recursos en nuestros países, a través de dibujos ya hechos, hacen un rearmado. Es una visión nueva sobre algo que ya existe´´, añadió Ferreyra, señalando grandes y coloridas pinturas en el interior de Y Gallery.
La pequeña galería de arte se encuentra en el corazón de Jackson Heights, un barrio de Queens con una enorme colonia de inmigrantes hispanos. El espacio decidió participar en la iniciativa y expuso las obras de Velasco y los argentinos Mastracchio, Rondolini y León, además de tres argentinos más. Todos ellos forman parte de una ex galería de Buenos Aires convertida ahora en proyecto artístico: El Tigre Celeste. A cambio, las obras de Y Gallery viajarán en julio a Argentina.
"Queremos dar a conocer la obra de la mexicana Dulce Pinzón, que muestra a inmigrantes vestidos como superhéroes´´, explicó Cecilia Jurado, comisaria de exposiciones de Y Gallery. "Su obra trata sobre inmigración. Me parece interesante que la conozcan en Buenos Aires´´. Los orígenes de Gallery Swapping precisamente se remontan a El Tigre Celeste, que abrió sus puertas como galería en el 2006 de manos de Najt y Clara Celeste Bakota. Después de unos meses, se convirtió en un espacio de promoción artística por Internet. Tras trabajar juntas en un proyecto, Najt y Ferreyra empezaron a tantear la idea de "llevar artistas argentinos y chilenos al exterior´´.
Ahora, están sentando las bases de Gallery Swapping, iniciando un diálogo con una galería de Londres y ya tienen a unos 25 artistas dispuestos a participar en el proyecto. Tras una primera exposición en noviembre del 2008 en Miami, están acordando otra muestra en Berlín y otra en Nueva York este año.
"El proyecto está creciendo más deprisa de lo que esperábamos´´, señaló Ferreyra, cuyo objetivo es organizar seis exhibiciones al año en distintas ciudades del mundo. Las obras son transportadas por las galerías o los propios artistas, que han de estar dispuestos a pagarse el viaje. Si venden sus obras, tendrán que repartir parte de las ganancias con la galería de su país y la galería en la que exponen. "Es una alternativa a las ferias de arte", concluye la argentina. MAS INFO:
Por CLAUDIA TORRENS