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Pese a la crisis, el mercado da señales de recuperación. Loteos residenciales, locales y departamentos, principales obras.
Las trabas legales para la venta de tierras, uno de los problemas. |
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Una particularidad que caracterizó a la economía de Allen en los últimos años es el crecimiento de las inversiones inmobiliarias. Tras un largo período de letargo, la ciudad atraviesa una etapa en que los proyectos inmobiliarios volvieron a despertar el interés por la construcción y la realización de loteos residenciales. De la mano del sector privado, Allen también genera emprendimientos para seguir forjando su futuro.Cuatro loteos residenciales en marcha y en pleno proceso de venta, decenas de departamentos construidos y destinados a alquiler, un céntrico complejo de dúplex y dos edificios en ejecución, construcción de locales comerciales e inversiones que comienzan a proyectarse, son claros indicadores de la reactivación inmobiliaria que se viene registrando en Allen durante los últimos dos años.Para Juan José Luis Marín y Carlos Martinolich, ambos propietarios de inmobiliarias, Allen avanzó significativamente en el desarrollo del rubro. Si bien la actividad no se paralizó por completo por la crisis financiera internacional, hubo una merma en los movimientos inmobiliarios.“Es un incentivo para los habitantes de Allen ver que de repente la actividad tomó un impulso y se concretaron importantes negocios, fundamentalmente ligados a la inversión inmobiliaria en sí. Antes las ventas se centraban específicamente en la parte productiva: todos los años se compraban o vendían chacras. Ahora hay muchos terrenos grandes con posibilidades de proyectar edificios y planes de viviendas privados. Creemos que por la crisis internacional vamos a tener un parate, pero de a poco la gente empieza de nuevo a preguntar y a reactivar el mercado como hace unos 15 meses”, señaló Marín.“El mayor incremento se dio en alquileres y loteos. No así en unidades usadas porque en este punto la oferta siempre fue escasa, salvo en la época de la Convertibilidad. Desde el 2003 en adelante los alquileres han ido en franco aumento y, como la mayoría de los inversores optaron por construir departamentos de un dormitorio, se saturó la plaza. Nos están faltando unidades más cómodas con dos o tres habitaciones”, agregó Martinolich.En cuanto a los costos, un alquiler dentro del radio céntrico para una familia tipo oscila entre 1.200 y 1.700 pesos. Hay lotes disponibles a unas 12 cuadras del centro con un valor de entre 20 y 40 mil pesos. También hay lotes más costosos cercanos al sector céntrico cotizados en 100 dólares el metro cuadrado. Petroleros y profesionales jóvenes de Allen y localidades vecinas encabezan las consultas por alquileres y compra de lotes.“Los Aromos” es el nombre de uno de los loteos más relevantes de la ciudad. El emprendimiento está situado sobre la Avenida Roca, donde antiguamente estaba emplazada la fábrica “Bagliani”. “Las Margaritas”, “Fernando” y “Chaparral”, son los otros loteos residenciales y tienen en común que los tres están situados sobre accesos a la localidad. Hay por lo menos otros tres proyectos de loteos que están siendo evaluados por los inversores y que podrían darse sobre tierras productivas.Uno de los problemas de Allen es la concentración de tierra ociosa con trabas legales, que desde el sector se indica como contraproducente. Los inconvenientes son generalmente de legitimación porque los propietarios fallecieron o sus herederos no han hecho las tramitaciones correspondientes. “En este sentido sería necesaria una ley provincial para destrabar estas situaciones y que el municipio pueda actuar en consecuencia”, consideró Marín. Nuevas viviendas “El mayor incremento se dio en alquileres Nuevos inquilinosLa instalación en Allen, a partir de marzo del año que viene, de la Facultad de Odontología de la Universidad Nacional de Río Negro seguramente invita a los inversores a generar nuevos proyectos inmobiliarios. En pocos años, Allen deberá forjar una sólida infraestructura de productos y servicios para dar respuesta a las necesidades de la comunidad universitaria.“Si tuviéramos que hacer una proyección, yo diría que estamos con un déficit de doscientos departamentos porque hay chicos del interior y de otras provincias que han consultado por la Universidad de Río Negro y el inicio de la Facultad de Odontología. Tuvimos alrededor de 80 consultas por el tema, un número muy importante. La construcción de hostels sería una muy buena alternativa porque en los próximos cinco años vamos a tener cientos de personas más en la ciudad que van a estar estudiando”, resaltó Juan José Luis Marín. “Nosotros también recibimos consultas por Odontología. Creemos que, si bien existen módulos de un dormitorio, que hoy están sin alquilar y podrían servir para tal fin, sería lo ideal que alguien compre un lote grande y construya muchos departamentos”, destacó Carlos Martinolich.
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