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Por más que el gobierno nacional llame a los ciudadanos a “defender el modelo económico”, las estadísticas oficiales dan cuenta de que éste ha sido totalmente superado por la realidad. La pobreza ingresó en un punto de inflexión hacia el alza que no está siendo contenida por las medidas oficiales. Los ingresos tributarios –por cuestiones más propias que ajenas– se desploman de manera significativa. Y la economía se desacelera en forma preocupante, estando hoy ya en un proceso recesivo. ¿A qué se refiere el matrimonio K cuando pide la defensa de este modelo? Es difícil interpretar estos dichos. Lo único que queda claro es que para después del 28 de junio el gobierno ya prepara un nuevo ajuste en su plan económico.
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