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Con el último día de marzo parece que al fin se ha instalado el otoño real en nuestra región del Alto Valle del río Negro.
Se anticipa un período de relativa calma en las tareas del jardín, pero antes debo recordarles que hay cosas que es preferible hacer ahora y no en primavera. Una de ellas es la plantación de árboles y arbustos.
LAS VENTAJAS
Siempre he afirmado que la parte más importante de una planta es la raíz porque ella cumple las funciones del un corazón... un corazón múltiple que alimenta numerosas arterias (ramas) principales.
Lo primero que hace una planta desde el momento del trasplante, es priorizar el crecimiento de la raíz. Sólo una vez que ésta se ha afianzado para cumplir las funciones de absorción de agua y alimentos, recién entonces se dedica a la parte aérea.
Plantando ahora, el suelo se encuentra con mayor temperatura constante que el aire, que se enfría durante la noche. Esto favorece los tejidos de la raíz, que de esa forma pueden seguir desarrollándose y -por otro lado- el rocío, la mayor humedad relativa y el frescor nocturno disminuyen las exigencias de agua de la parte aérea, lo que permite que el sistema radical pueda dedicarse a crecer.
Seguirá creciendo en la medida en que las temperaturas del suelo lo permitan. De ese modo llegará a la primavera con mejor capacidad de enfrentar temperaturas en aumento y los fuertes vientos desecantes de nuestra Patagonia... no debemos olvidar que estamos inmersos en un clima semiárido, sumamente agresivo para muchas plantas de orígenes muy diversos.
A TENER EN CUENTA
Pero no solamente el medio ambiente será determinante en el éxito de la plantación sino también la forma de plantación. Debemos elegir primero que nada la mejor ubicación para cada planta... el eslogan será siempre "primero el lugar y luego la planta adecuada para él".
Definido este punto, preste atención al hoyo de plantación. Deberá ser lo suficientemente amplio para que quepan las raíces sin doblar o cortar demasiado y tener un muy buen drenaje.
Antes de plantar, llénelo con agua y verifique que ésta drene en poco tiempo. Los tejidos de las raíces no sólo absorben agua y nutrientes sino que como todo ser vivo necesitan oxígeno para respirar. Si el agua queda estancada, morirán por asfixia.
Cambiar las costumbres
Somos animales de costumbre... ¡qué duda cabe! Invariablemente en agosto y setiembre nos embarga la "urticaria del jardín" y salimos en tropel a hacer las compras en los viveros de venta al púbico. Estos, atentos a la demanda, hacen los pedidos a los viveros productores a fin del invierno.
Esto no es bueno para las plantas porque las obligamos a enfrentar el clima hostil de nuestro semidesierto sin un buen sistema radical. Además, deben aguardar a ser vendidas en un ambiente cada vez más caluroso y cuando el stock se acaba, llegan nuevas remesas en camiones cerrados pero expuestos por largos días al calor.
"Plantar se puede plantar todo el año", es el eslogan comercial. De acuerdo, pero si me dejan elegir, prefiero hacerlo en otoño por los motivos ya apuntados. Por suerte, hay proveedores atentos y dispuestos a traer en cualquier momento las plantas que les pedimos, aunque a ellos se les complica el tema del transporte, que puede encarecer el pedido.
Teodorico Hildebrandt