"Si los brasileños tienen problemas dentro de la crisis internacional, nosotros estamos al horno, y encima si vamos todos a la cebolla corremos el riesgo de que se transforme en un monocultivo como consecuencia de la falta de planificación agropecuaria", advierte De Cara.

Desde este pedazo de tierra patagónica se ve una Europa todavía sobrecargada de producción y un Estados Unidos que no apareció en las compras.

Este referente cree que el sector aún tiene ventajas porque es temprano para las discusiones, dado que la furia comercial puede aparecer en los próximos 60 días.

De Cara y Cardoso, del Idevi, suman apreciaciones similares acerca de las actuales circunstancias: la bolsa debería cotizar a 15 pesos. Las complicaciones exhiben cartelitos de entre ocho y 10. "Si nos quedamos en estos últimos valores -apunta Cardoso- salvamos gastos, pues desde la siembra al embolsado todo el circuito nos sale eso".

Los chacareros sacan cuentas. El alquiler de la tierra en el Idevi requiere 2.500 pesos por hectárea y el kilo de semillas pasó de 50 a asombrosos 300 pesos. "Así es imposible de vender. Habría que esperar hasta que amanezca, en un mes debería repuntar", dice a nivel de consuelo.

Para Rodríguez, que lleva once años en los envíos a Europa y cuenta con 150 contratos laborales en pleno auge, el Viejo Continente "arrancó desinflado". Asimismo, alertó que "será un año ajustado en virtud de que Europa no tiene precio y Brasil no empezó a comprarnos".

En líneas generales, Benítez observó que el año se vislumbraba bastante interesante y con muchas expectativas.

Le bastó recordar que en noviembre y diciembre del año pasado por la zona ya había compradores acumulando stock. Hubo transacciones anticipadas sobre volúmenes a cosechar a mediados de febrero y se pagaron entre 18 y 20 pesos por bolsa. Cancelaron entre el 40 y el 80% en efectivo y el resto este mes, cuando ya estén fuera de la tierra.

"Pintó un panorama muy bueno" considerando que los rendimientos medios de la zona alcanzaron las 1.800-2.500 bolsas por hectárea, resumió.

Como asesor técnico de la Cámara de Productores del Valle Inferior Benítez ensaya algunas explicaciones tomando en cuenta que la producción del Estado brasileño de Santa Catarina se perdió por razones climáticas. "Aun así, el mercado brasileño no respondió o no responde como se esperaba; a eso, agreguemos que los exportadores todavía tienen cebolla comprada a fines del 2008 y hoy se carece de movimiento. El precio por bolsa ronda sólo los 10 pesos y no hay más que dos compradores en esta zona, es decir, está bastante quieto y hay mucha incertidumbre. Ahora, si esto es debido a la crisis mundial... tengo mis dudas. Para mí, la cebolla no es un artículo de lujo ni uno sustituible".

El ADN de esta hortaliza estimula el apetito y tiene efectos favorables para el aparato digestivo.

Quizá los consumidores tengan presente el sabor en sus paladares degustando una gran variedad de menúes. Mientras, quienes le dan valor en la cadena productiva esperan que el mercado siga concentrando la atención en que se trata de un alimento insustituible.

elar la cebolla causa irritación ocular y un lagrimeo continuo. Es cosa juzgada para amas de casa y cocineros. Pero también los productores e intermediarios están llorando como huérfanos.

Las complicaciones se viven a diario. Sobre todo, por lo que aportan al concierto nacional los valles del noreste de la Patagonia vinculados -desde el punto de vista geográfico- con la mesopotamia de los ríos Colorado y Negro. El área productiva de Corfo bonaerense con epicentro en Luro declaró a la Fundación Barrera Zoofitosanitaria Patagónica (Funbapa) 18.486 hectáreas de sembradíos, General Conesa 2.000, el Valle Medio 852 y el Instituto de Desarrollo del Valle Inferior (Idevi) 593, que se complementa con Río Colorado, con 104.

Esta suerte de "made in Patagonia" contabilizó envíos al mercado interno por 27.584,36 toneladas en los primeros dos meses del año, según las certificaciones emitidas por ese organismo de control.

El ranking lo encabeza el partido bonaerense de Villarino, con 19.072 toneladas; 6.514 de Patagones, 724 de Avellaneda, 500 de la zona de Viedma, 322 de Conesa y 441 de Pichi Mahuida.

"Si comparamos con el 2008 salió exactamente lo mismo porque, si bien se generaron 2.000 más en enero, se compensaron con las 2.000 menos de febrero", acotó a "Río Negro Rural" la responsable de las certificaciones, Úrsula García Lorenzana.

Mirando hacia los barcos, la exportación registró 14.300 toneladas al 15 de este mes. "En la temporada anterior a la misma fecha remitimos 1.300 toneladas menos. Los envíos a ambos mercados son muy parecidos a los del año pasado para esta altura del calendario", resumió. Lo que tienen claro en Funbapa es que se está despachando menos a la Unión Europea, aunque el desembarco en el Viejo Continente se circunscriba a un período muy corto que va desde febrero hasta después de las Pascuas. El primer camión cuyo chofer habla el "portuñol" partió a Brasil el 7 de febrero pasado.

Penando con las circunstancias

Hay voces coincidentes que pretenden alejarse de estas complicaciones. El grupo lo integran el exportador Miguel Rodríguez, el productor Héctor Cardoso, el asesor técnico Santiago Benítez (Valle Inferior) y Luis de Cara por los embalajes PADE del valle bonaerense del río Colorado.

POR BUENAS CAPAS

En todo el mundo se investiga el empleo de tecnología menos agresiva para desarrollar alimentos seguros pero al mismo tiempo de alta calidad, aseguran técnicos del INTA.

Con ese objetivo el organismo a través de las sedes de Castelar y La Consulta, y junto con el Instituto de Tecnología de los Alimentos (ITA) del Centro Nacional de Investigaciones Agropecuarias, profundizó conocimientos de la actividad antimicrobiana de compuestos fenólicos presentes en las cebollas.

El nombre científico es Allium cepa y las variedades estudiadas, Valcatorce INTA, Valuno INTA, Cobriza INTA, Navideña INTA, REFINTA 20, Angaco INTA, Antártica INTA y Ancasti, desarrolladas por la unidad mendocina.

Las investigaciones consistieron en determinar el efecto inhibitorio del jugo de las cebollas y de ocho polifenoles puros sobre Staphylococcus aureus y Escherichia coli O157:H7, dada la elevada incidencia de estos patógenos en enfermedades que se transmiten a través de los alimentos.

El jugo de todas las variedades resultó efectivo en más de un 80% para inhibir el crecimiento de Staphylococcus aureus.
Los datos obtenidos permiten seleccionar las variedades Ancasti y REFINTA 20, al igual que los polifenoles quercetina, miricetina y ácido cafeico, para su utilización en estudios futuros relacionados con la aplicación de antimicrobianos naturales en el ámbito de la tecnología de alimentos.

OJO CON LAS VARIABLES

A veces las infecciones con especies del género Fusarium, Carbonilla o salinización impiden pegar un ojo en la almohada, tanto en chacras de Corfo y como del Idevi.

Las estaciones experimentales del INTA Hilario Ascasubi y Valle Inferior tienen su propio cuerpo de "bomberos" para atender estas emergencias.

Experiencias propias y datos estratégicos sirvieron para elaborar una guía práctica de manejo.

La ingeniera agrónoma Adriana van Konijnenburg aportó que los resultados productivos están determinados por un gran número de variables que, en algunos casos, no son manejables por el productor pero en otros pueden ser controladas mediante la planificación y el manejo correcto del cultivo.

Considera que la elección del lote, la preparación de la cama de siembra y el riego son prácticas que deben planificarse con tiempo suficiente antes de la siembra, porque condicionan el rendimiento del cultivo.

Verónica Caracotche es la encargada de realizar inspecciones sobre el sector denominado "Buenos Aires-Sur".

La experta advierte que el Fusarium "lo encontramos en casos aislados", lo cual "no quiere decir que tengamos que hacer rotaciones de cultivos usando alfalfa, porque se ve una sobrecarga en el uso de la tierra".

La mayor preocupación de los expertos está dirigida ahora hacia los problemas de salinidad que tiene el área Corfo como consecuencia de los escurrimientos del río Colorado, que recibe aportes del Curacó.

"Los pequeños productores que siembran tres hectáreas perdieron lotes enteros. Esta cuestión fue más favorable para aquellos que tienen grandes superficies", observó.

Las recomendaciones para los futuros arrendamientos es que se hagan análisis de suelo y se averigüe la historia de los lotes.
Las advertencias oficiales se orientan a una profunda investigación. Resulta más importante efectuar análisis de los predios a una profundidad mayor de 20 centímetros y la clave está en un buen lavado de suelos que tengan un buen nivel de drenaje.
"Nuestra tarea es concientizar al chacarero en este tipo de procedimientos", afirmó Caracotche.

Enrique Camino

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