Lejos estuvo Deportivo Roca de repetir la última actuación en casa. Ante Huracán (CR), el equipo ganó, goleó y gustó como nunca antes en este torneo. Pero sin dudas la de ayer ante Racing de Trelew, fue tan o más importante como la de dos semanas atrás.

El 2-1 del 'Naranja' fue tan sufrido como trabajado. No lució, es cierto, pero supo dar vuelta un resultado en un partido que fue más complicado de lo esperado. El colista del grupo 2 fue un duro rival, que al comienzo no lograba tomar las marcas del circuito ofensivo del 'Depo', generado por Walter Dupré en el medio y por las subidas de Darío Escudero por la derecha.

Pero la imprecisión comenzó a afectar los pies 'naranjas', su juego se volvió tibio y cayó en un profundo pozo. Como consecuencia, antes del final de la etapa, centro cruzado de Díaz y aparición fantasmal del verdugo de siempre: el 'Piojo' López.

En desventaja, Roca salió a jugar el complemento con la consigna de recuperar su fútbol, el mismo que había desplegado en los primeros 20' de partido. Mucho no había podido hacer, cuando a los 9' Price lo tomó en el área a Fune Castro tras un centro. Penal que Escudero transformó en igualdad.

Lo que siguió inmediatamente tras el empate, sin dudas no fue lo más rescatable del encuentro. Racing se conformaba con el empate, el árbitro Duarte comenzó a tomar protagonismo con algunos fallos dudosos y Roca caía en la trampa que le tendía su rival.

Pero a 10' para el final, Duarte vio una falta de Maza sobre David Napolitano cerca del vértice izquierdo del área. El tiro libre lo tomó Dupré, que le pegó directo al arco cuando todos esperaban el centro, incluido el arquero Armendi.

Roca lleva dos de dos en el 2009 jugando en el 'Maiolino'. La resurrección está en marcha...