-¿Cómo viene la temporada 2009 en comparación con la del 2008?

-Estamos un 20% más abajo, aproximadamente, tanto en número de plazas ocupadas como en cuanto a facturación en toda la provincia. El problema es que estamos comparando contra el 2008, que ya presentaba una caída con respecto a años anteriores.

-¿Y si se compara con el 2007?

-Estimo que alrededor del 40%. En el 2007 el nivel de ocupación fue del 75 al 80%. En este momento ronda el 50% en promedio.

-¿Cuál es la situación en la cordillera?

-Tienen mayor ocupación los establecimientos de una estrella o los que están sin categorizar que los de 3 estrellas. Los de 4 ó 5 tienen una ocupación del 25%. Se notó un repunte a partir de la segunda quincena de enero. También se ve una restricción al consumo en el sector gastronómico.

-¿Cómo está afectando a las empresas del sector?

-La menor demanda ha hecho que los establecimientos compitan más con las tarifas para atraer gente, cosa que hasta el 2007 no sucedía. En el 2008 hubo problemas pero no tan graves como este año.

-¿Y con respecto a la afluencia del turismo extranjero?

-Este año, con la devaluación de Brasil y Chile, nos afectó todavía más. Ingresan menos chilenos a Neuquén y muchos turistas de Capital Federal que son de ir a la cordillera viajan a Brasil.

-¿Cuál es el nivel de apoyo del gobierno provincial?

-Se dio un gran paso con la creación de Neuquentur. Otro avance que aún no concluyó fue la licitación de las líneas aéreas interprovinciales. También lo que se está haciendo desde la Secretaría de Estado con Rodolfo Laffitte en tecnología de comunicaciones de internet y celulares en el interior de la provincia. La venta a través de internet es cada vez mayor.

-¿Qué otros avances se pueden destacar?

-Es positiva la continuidad de la obra del autódromo, porque atrae el turismo deportivo los fines de semana, que es cuando merma mucho la ocupación. También el convenio que firmó la Federación Empresaria Hotelera y Gastronómica de la Argentina con el gobernador de Neuquén para capacitar gente en el interior de la provincia.

-¿Cuáles son las materias pendientes?

-Poner nuevamente en funcionamiento Neuquentur, con un buen presupuesto. Me preocupa que la masa salarial se lleve los recursos del Estado; después no queda nada para obras y promoción. Y los gremios siempre van por más. La provincia de Salta, por ejemplo, no ha dejado de hacer publicidad en ningún momento y nosotros, como provincia, no tenemos el nivel de presencia de otros años a escala nacional.

-¿Qué otros factores preocupan al sector?

-Otro gran problema es el de los establecimientos parahoteleros que se están generando en Neuquén capital, es decir, que no están registrados en Turismo ni en el municipio. Hay hospedajes que están funcionando y la municipalidad no los fiscaliza.

-¿Qué problemas puede generar esto?

-Podemos tener otro Cromañón. También son lugares ideales para que el delito se instale. En los establecimientos habilitados, todos los días el personal policial pide la planilla de pasajeros para hacer un seguimiento de la gente que se hospeda. En los hospedajes no habilitados no hay control. Cuando me entero de que están robando en departamentos me pregunto: ¿no será que dentro de esos edificios también hay alquileres temporales?

-También es una competencia desleal?

-Sí, por la gran carga fiscal que tenemos los establecimientos habilitados. Además de la gran cantidad de trámites que hay que hacer permanentemente ante Bromatología y Bomberos, que me parecen correctos porque de eso depende la seguridad de las personas. Pero estos establecimientos no son controlados.

-¿Cómo ve las perspectivas de la temporada de invierno?

-En gran parte va a depender del clima. Si tenemos nieve temprana, a fines de mayo o principios de junio, la gente lo ve por tevé y se generan las ganas de venir. Si no, la gente preferirá irse a Brasil o al Caribe, antes que arriesgarse o prepagar algo que no sabe si podrá usar.