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La pera mete presión

Unas 350.00 toneladas no podrían ser exportadas hacia ultramar.

Las estadísticas oficiales dan cuenta de que para esta temporada en el Valle de Río Negro y Neuquén la cosecha de peras totalizará 755.200 toneladas. La cifra representa un incremento del 25% respecto de los niveles consolidados el año anterior.

Los mismos guarismos muestran que a la fecha de autorización de cosecha los calibres menores que 80 y mayores que 135 totalizan 360.000 toneladas. Y ésta es la fruta que los empacadores ya adelantaron que difícilmente puedan recibir en función de lo que hoy está reclamando el mercado de ultramar. Para la mayor parte de los operadores, no toda la pera pronosticada para esta cosecha podrá ser colocada. Hoy más que nunca se exigen calidad y calibres adecuados.

En lo que respecta a la William's, la variedad que ya está en condiciones de ser levantada de la planta, muchos productores aún no comenzaron su recolección por falta de tamaño y en virtud de la incertidumbre que existe en torno de los precios que las em

presas van a pagar. En esta variedad se espera una cosecha de unas 345.000 toneladas. A la fecha, cerca del 35% de este volumen muestra calibres que no se ajustan a lo que reclama el mercado.

La mayor parte de los productores estima iniciar la cosecha el lunes y el pico dará comienzo a partir del miércoles. En procura de lograr tamaño y valores en firme, el productor ingresa en un peligroso sendero teniendo en cuenta la evolución en la presión de la fruta y los tiempos que se necesitan para cosecharla.

Los programas de cosecha e ingreso de William's a las empresas detallan que esta variedad -con destino a los mercados de Europa y Estados Unidos- se recibirá hasta el 24 de este mes. Computando el miércoles como inicio pleno del proceso, el productor y el empaque contarán con sólo 10 días para recolectar toda la pera con destino a ultramar.

En términos materiales queda demostrado que en sólo 10 días es imposible armar un esquema de cosecha y logística de modo de terminar 225.000 toneladas de peras, y menos aún si se tienen en cuenta las características de la William's, muy delicada en el tratamiento de poscosecha.

En definitiva, el productor deberá evaluar el costo-beneficio de postergar la recolección unos días más para lograr tamaño y precio, en desmedro de la pérdida de presión.

(Redacción Central)



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