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INICIACIÓN ORGÁNICA
Un lector nos relata sus comienzos. Preguntas y respuestas que orientarÁn a quienes deseen seguir su camino.

LIMONERO

Al limonero se le aplicó un remedio químico hace algunos años.
Posee la mayoría de las hojas sucias y algunas con pequeñas perforaciones.
Por lo que pude ver en las revistas, parecen ser cochinillas algodonosas.
Durante la noche hemos observado un insecto (en realidad eran varios) parecido a una polilla pero algo más chico, con alas color plateado en forma de triángulo. Iban de hoja en hoja y no alcanzamos a ver lo que hacían en cada una.
Además estamos observando gran cantidad de hormigas pequeñas en las hojas. Nos da la impresión de que ambos están limpiando las hojas, ya que en algunos sectores pareciera que está más limpio. ¿Convendrá que hagamos algo para ayudar?
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Lo que se observa es clorosis, manifestada por hojas amarillentas con nervaduras más verdes, debido a que el suelo o el agua (o ambos) son muy alcalinas o salitrosas, lo que bloquea la absorción de hierro del suelo y con él la de nitrógeno, que le da el color verde al follaje. La solución es cubrir el suelo debajo de él con azufre en polvo del que se usa en las viñas, a razón de unos 50 gramos por metro cuadrado, el que luego se incorpora con una leve carpida. Se trasforma lentamente en ácido sulfúrico y acidifica el suelo por largo tiempo.
Las hormigas se deben a la presencia de pulgones, ya que ellas aprovechan sus deyecciones azucaradas.
Los pulgones no son problema, ya que tienen numerosos enemigos naturales.
Las cochinillas algodonosas se controlan con dos pulverizaciones de aceite emulsionable de verano al 2%, con intervalos de 20 días.
Pero sólo si se comprueba su existencia, ya que esa aplicación afectará a la fauna predadora.
Ni el azufre ni el aceite son tóxicos, ya que éste mata por asfixia.

DAMASCO

En la corteza del damasco vimos muchas pequeñas perforaciones de aproximadamente 3 ó 4 milímetros de diámetro que no parecen ser muy profundas pero son perfectamente cilíndricas. Además, la corteza no presenta un buen aspecto.
En las últimas semanas se están cayendo los frutos antes de madurar.
En la base y hasta en el mismo tronco están saliendo hongos, los cuales no son todos iguales y pareciera que van muriendo y naciendo otros distintos. Estuvimos mirando y pudimos ver un bichito de aproximadamente 1 centímetro de largo, negro y con varias patitas; aparenta tener una caparazón negra más dura, es muy rápido y sólo se dejó ver una vez.
Un dato que puede ser importante: el damasco quedó incluido dentro del sector donde hicimos la pequeña huerta. En el otoño-invierno dimos vuelta la tierra bajando el nivel a aproximadamente 30 centímetros, colocamos hojas secas de plantas y frutales, desperdicios de la cocina (cáscaras de frutas y verduras) y restos de pasto cortado. Luego, tapamos con la misma tierra rompiendo los terrones y en algunos sectores colocamos pasto cortado también en la superficie, en otros, hojas de pino secas. Durante esta tarea vimos gran cantidad de lombrices, algunas de gran tamaño. Ya en primavera comenzamos a plantar semillas y plantines en surcos (tomates, zapallo, maíz, acelga, etc.).
¿Puede estar afectándole el tener la huerta a sus pies? ¿Hay algo que podamos hacer con las perforaciones y el o los causantes de las mismas?
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No me caben dudas de que las perforaciones son causadas por el taladrillo grande y el hongo probablemente se esté desarrollando sobre las exudaciones de esas heridas, pero no es patógeno (causante de enfermedad) sino saprófito (se alimenta de materia orgánica). La huerta orgánica a sus pies es sumamente beneficioso, máxime si ya hay gran cantidad de lombrices.
Solucionando el ataque de taladrillo, buen riego y excelente drenaje, las grietas desaparecerán. Para el control del taladrillo, en nota separada le doy el contacto con el INTA Alto Valle, que está estudiando esta plaga.
Las perforaciones en las hojas no se ve como un problema serio y lo encararía en una etapa posterior.
Recuerden que la tierra no se da vuelta -salvo al comienzo de la huerta orgánica-, sino que se cubre con mulch, que es mucho más práctico que hacer silos de compost y da el mismo resultado.

CEREZO Y GUINDO

Aunque su carta no lo menciona expresamente, las fotos que me remite de su cerezo y su guindo confirman el ataque de taladrillo, pero además muestran otro síntoma interesante.
Lo que se observa en sus troncos es gomosis, una exudación de savia que se vuelve densa y que no es una enfermedad sino un síntoma de asfixia de raíces y probablemente provocado también por las perforaciones de taladrillo.
Tanto estas dos especies frutales como el damasco (duraznero y ciruelo incluido) sufren de asfixia radical con suelos apelmazados.
Eso se puede remediar haciendo perforaciones verticales con un caño de 2 pulgadas provisto de punta, el que se va clavando en el suelo unos 2 metros aproximadamente, preferentemente en la línea vertical de la punta de la copa hacia afuera, ya que allí se halla la mayor parte de los pelos absorbentes de las raíces, porque en esa zona aprovechan el agua de lluvia que cae como en un paraguas.
Asimismo se lastima la menor cantidad de raíces gruesas, de sostén.
El caño se va moviendo a medida que se clava, para poder sacarlo y la perforación resultante se llena con arena gruesa de construcción. Adicionalmente conviene colocar en toda la superficie de la huerta una capa de arena de construcción de entre 10 a 20 centímetros, la que se incorpora al suelo con una punteada (se puede combinar con el agregado de azufre).
Eso va a permitir que el oxígeno llegue a las raíces, pero tendrá que ser complementado con un muy buen drenaje, lo que también se logra con las perforaciones verticales ... si 2 metros es poco, habrá que ir más abajo, pero lo importante es que después de un riego o lluvia, el agua no quede estancada.

CIEN AÑOS DE HISTORIA A LA...

¿Cuántas cosas se pueden vivir en cien años? Muchas seguramente y por ende muchas más en el caso de un árbol que puede alegrarnos la vida por varios centenares.  Claro, si no media la mano del hombre, que decide arbitrariamente ponerle fin sin ningún motivo aparente.
No puedo decir con exactitud cuántos años tenía este sauce mutilado en varias ocasiones y finalmente asesinado fríamente. O acaso es asesinato solamente cuando de un ser humano se trata. Ubicado sobre lo que fue una acequia de riego, en el límite de una propiedad, la pregunta de rigor es a quién molestaba, qué obra importante entorpecía, qué peligro significaba, qué beneficio se esperaba de su madera. Las imágenes son elocuentes... su tronco principal estaba absolutamente sano y vigoroso y lo único seco en él eran las mutilaciones que sufrió en su lucha desigual con el hombre.
Una verdadera pena y deja tras sí una sensación de impotencia. A pesar de los insistentes llamamientos a nivel mundial en pro de la conservación de la vida vegetal, del calentamiento global, de la Conferencia de Kyoto, de la cuota de carbono y otros tantos discursos retóricos, la impunidad con que se actúa es lamentable. Unos cien años de historia yacen en el suelo...
 (T. H)

UN PARADOR DISTINTO, EN ROCA

El ya clásico parador de la costa del río Negro en Roca, “Changos club”, inaugura la nueva temporada el miércoles con una imagen renovada por el arquitecto Leandro Suárez y más servicios y actividades. 

Estimado Teodorico:
mi nombre es Claudio, tengo 32 años y desde hace aproximadamente uno estoy incursionando en el mundo de las plantas.
En la primavera-verano del año pasado empecé a hacer una huerta junto con un vecino en el patio del lugar donde vivo (una casita en Puerto Madryn), que continúo durante los días de semana. Todos los fines de semana viajo a Bahía Blanca, donde también hicimos una pequeña huerta en familia en el patio de la casa de mi papá y comenzamos a ayudar a unos amigos a limpiar, dar vuelta la tierra y abonar el patio del lugar donde viven.
Estamos empezando a alimentar el suelo con la elaboración y uso del lombricompuesto, compost y mulch. En los tres patios habíamos colocado restos orgánicos de la cocina y del jardín pero en lugar de hacer primero el compost lo colocamos directamente en la tierra a medida que la fuimos dando vuelta. ¿Qué complicaciones nos puede traer?
A través de la revista de Maipué y de tus artículos empezamos a entender la importancia y necesidad del jardín biológico y la huerta orgánica y ya tomamos la decisión de no aplicar fertilizantes ni plaguicidas químicos y -como bien vos decís- empezaron a aparecer un montón de pequeños trabajadores a ayudarnos y otros a llevarnos en andas.
En el patio de la familia amiga todavía estamos en la mitad del proceso de dar vuelta y abonar, no plantamos nada por lo que, de ser necesario, estamos a tiempo de volver a mover los sectores que ya hicimos. Para el resto del patio todavía no tenemos el compost realizado por lo que la idea es continuar agregando restos de la cocina en pequeñas cantidades y guano o estiércol ¿Es correcto?
Leí en una nota que el estiércol o guano debe estar fermentado. ¿Cómo me puedo dar cuenta si ya está apto para usar? ¿En caso de que no lo esté, cuál es el proceso que podemos realizar? ¿Cuánto tiempo tiene que pasar después de agregarlo para poder plantar?
Te cuento que empezamos a descubrir una gran cantidad de “bichitos” y si bien todavía no distinguimos
-salvo algunas excepciones- los aliados y enemigos, estamos observando algunas cosas que nos hacen dar una idea.
Te escribo para contarte y consultarte sobre algunas cosas que están ocurriendo y ver si hay algo que podamos hacer.
En Bahía, en el patio de mi familia hay varios frutales de entre 10 y 15 años.
Salvo en un limonero donde hace algunos años se aplicó un remedio, en los otros no se han aplicado fertilizantes ni plaguicidas, tampoco hasta este momento se había alimentado el suelo y a través de los años ha sufrido varias podas.
Me alegró mucho dar con la forma de ponerme en contacto contigo, ya que cuando empezamos a leer tus artículos no me imaginé que te iba a poder escribir. En este último tiempo hemos tenido (mi familia y yo) muchas vivencias relacionadas con la naturaleza y estamos convencidos de que cada cosa nos está enseñando a vivir.
Espero poder seguir contándote las experiencias que vamos teniendo y cómo avanzan los tres patios y además transmitirte cómo se va cumpliendo lo que nos enseñás en tus notas. Pero iré por partes.
Muchas gracias, un saludo afectuoso.

Claudio, Puerto Madryn/Bahía Blanca.



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